Un informe realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) asegura que avanzar en la igualdad de genéro en los sistemas agroalimentarios podría acabar con la inseguridad alimentaria de 45 millones de personas.
En el informe se destaca que, a escala mundial, "el papel de las mujeres tiende a estar marginado y sus condiciones laborales suelen ser peores que las de los hombres en trabajos irregulares, informales, a tiempo parcial, poco cualificados o que requieren un uso intensivo de mano de obra. De igual forma, las mujeres que trabajan como asalariadas en la agricultura ganan 82 centavos por cada dólar que reciben los hombres".
En ese sentido, QU Dongyu, Director General de la FAO, afirma en el prólogo del informe que “si abordamos las desigualdades de género endémicas en los sistemas agroalimentarios y empoderamos a las mujeres, el mundo dará un salto adelante en la consecución de los objetivos de poner fin a la pobreza y crear un mundo sin hambre”.
La FAO estima que cerrar la brecha de género en la productividad agrícola y la brecha salarial en el empleo agrícola aumentaría el producto interior bruto (PIB) mundial en casi 1000 millones de USD y reduciría el número de personas que padecen inseguridad alimentaria en 45 millones.
A su vez, los beneficios de los proyectos que empoderan a las mujeres son mayores que los de los que se limitan a tener en cuenta las cuestiones de género. Los autores explican que, si la mitad de los pequeños productores contaran con intervenciones de desarrollo centradas en el empoderamiento de las mujeres, se produciría un aumento significativo de los ingresos de otros 58 millones de personas y de la resiliencia de otros 235 millones.
Fuente: Agrofy