En el caso del suceso paranormal que se registró en una fotografía tomada en el cruce ferroviario ubicado en el KM 227 de la Ruta 34, a escasos metros del INTA, podemos estar hablando de un fantasma o espiritu. Podemos llegar a decir que es así pues es una manifestación de una niña, no de esta época, sino de los años 50 o 60 (o quizás de antes). Su peinado y su ropa nos hace llegar a esa conclusión. Un análisis que hemos realizado con un software fotográfico comprueba que la imagen es la de una nena real (no un dibujo) y que no parece estar superpuesta sobre la foto, pues carece de calidad la toma hecha con el celular. Otro factor importante es donde está parada, su estatura y la dirección de su mirada, que obviamente es hacia la cámara. Otro detalle importante es que en sus brazos parece tener un muñeco, quizás de trapo, como las muñecas de antaño.
Un equipo de investigación de Rafaela Noticias, conformado por tres personas, nos acercamos al lugar el jueves 24 de julio, para corroborar los hechos y dar testimonio a través de fotografías del misterioso lugar, en diferentes momentos del día. Primero fuimos a las 16.30 hs., junto a un especialista en prestidigitación y capaz de detectar si se pudo utilizar algún tipo de truco o artimaña en la foto. A pleno sol e hicimos diferentes tomas fotográficas desde distintos sectores.
También pudimos charlar con un familiar del hombre que aparece en la foto donde aparece la niña fantasma. Él nos pudo ratificar los hechos y nos contó cómo fue todo. Dice que días pasados a al atardecer, se disponían a juntar los carteles indicativos y todas las cosas del puesto de ventas de alfajores, cuando sucedió todo. Fue ahí que la hija de hombre que aparece con el cartel en la imagen le tomó una foto con su celular, a petición de éste. Hasta ese momento no pasó nada. Fue después que la mujer, cuando la bajó a su computadora, se dio cuenta que su padre no aparecía solo en la foto, sino que una pequeña estaba parada detrás de las vías, sobre el cardinal sur de la ruta. A través de un análisis que hicimos se puede ver claramente que la silueta semitransparente, que pareciera de una nena, que por su vestimenta no pertenecería a un tiempo reciente, sino aproximadamente de las décadas del 50 o 60. Para muchos esto puede ser espeluznante, pero es muy común que sucedan estas cosas y más en un lugar donde fallecieron muchas personas en forma trágica, cuando fueron arrollados sus vehículos por el tren.
Según la información que recibimos, no es la primera vez que la mujer recibe estos mensajes del más allá a través de imágenes, sino que lo experimentó innumerables veces, no solo allí, sino también en diferentes lugares. He aquí que podemos afirmar que quizás es una persona que tiene la capacidad de percibir lo que no todos podemos captar a través de nuestros sentidos y formas tradicionales de recibir información del más allá. En el mundo existen un sin número de casos similares, en donde personas vivas o mascotas que son fotografiadas aparecen en compañía de personas que no estaban allí y que poseen la características físicas de gente que murió en el lugar o simplemente familiares cercanos fallecidos. Esto data desde finales del Siglo XIX, con la aparición de la fotografía, hasta hoy.
El cuerpo está formado por energía, que es nuestra esencia, por lo que debemos entender que nuestro interior es más que un cuerpo físico. Está comprobado que la energía, buena o mala, queda en los lugares donde vivimos o frecuentamos, como también en los lugares de muerte violenta. He aquí algo muy importante: un cruce de malas energías en una calle o ruta puede generar confusión en los que transitan allí, en cuestión de segundos, provocando accidentes constantemente. Pensemos en algunos lugares en Rafaela y nos daremos cuenta de ello, como el cruce de Av. L.Fanti y Av. Angela de la Casa, donde tantas muertes se suscitaron durante años.
Según investigadores de lo paranormal, mediums y diferentes expertos en la materia, coinciden que el alma de las personas que mueren en forma trágica e inesperada pueden quedar atrapadas en este mundo en tiempo y espacio por diferentes razones, al no darse cuenta de la magnitud del hecho, por confusión y por morir antes de que llegara su tiempo, sin llegar asumir que han muerto. Los lazos familiares o laborales, el desconcierto o la necesidad de que se haga justicia, el temor a lo desconocido entre otras circunstancias no les permitirán descansar en Paz. Otra razón mas que importante por la que permanecen en el lugar donde murieron es para hacer una advertencia sobre un peligro inminente y encontrar una solución ante un problema en concreto. Esto sería por ejemplo, si hay varias muertes por accidente en un mismo lugar, tratarían de hacernos concientizar de cómo están las rutas, de las condiciones en las que se conduce (consumo de alcohol y estupefacientes) y como se conduce (Imprudencia, error humano, etc.). He aquí la cuestión si lo que sucede realmente en el cruce ferroviario ubicado a cercanías del INTA es un mensaje de almas que permanecen en el lugar para que un día se solucione las problemas que hay allí y en qué condiciones está, lo que genera los accidentes.
El jueves a la noche, aproximadamente a las 21 hs., volvimos al lugar, esta vez con dos cámaras fotográficas para poder registrar desde dos perspectivas distintas. Lo que narraremos a continuación es una serie de hechos algo extraños, que algunas personas puede generar temor os escalofríos. Era una noche muy fría cuando arribamos al lugar. Estacionamos en el camino que se dirige al autódromo. Lo primero que hice fue fotografiar a la inmensa oscuridad. La sorpresa fue la cantidad de orbes que aparecían a medida que el flash de nuestras cámaras destellaba en la oscuridad y que podíamos ver a nuestro alrededor. ¿Qué son los orbes? Para algunas personas, los orbes son ciertas anomalías que parecen en fotos por efecto de sustancias en suspensión como gotas de agua o polvo, que al ser reflejadas por el flash generan un efecto de reflexión provocando que surjan pequeñas o grandes esferas luminosas en las fotos. También consideran que pueden provocarse por suciedad en la lente, alterando así la fotografía.
Para otros significa algo totalmente distinto. Dicen que son esferas que contienen energía electroestática de un alma desencarnada que al desplazarse en el plano etérico, en una dimensión imperceptible por nuestro sentido de la vista, el uso del flash en combinación con la sensibilidad de las cámaras digitales los hace visibles. Al ser almas desencarnadas necesitan de energía vital, y es por eso que surgen normalmente donde se producen eventos de alta concentración energética y emocional. Es así que aparecen en lugares donde hay personas buscando comunicarse con ellos o meditando.
Una tercera corriente investigativa considera que los orbes son ángeles que adoptarían estas formas esféricas y poder ser así visibles. Una cuarta corriente dice que podrían provenir de otros mundos, como alguna tecnología espía extraterrestre.
En nuestra opinión podemos decir que no había polvo en el aire, pues la tierra estaba húmeda. Lo que me sorprendió es que esos orbes no solo aparecieron en las fotos sino que los pude ver por sobre mi cabeza cuando sacaba las fotos y las luces del flash las iluminaban. Fue un momento de mucha emoción, una experiencia única porque era la primera vez que vivía una situación así en carne propia. Algunos habrían salido atemorizados al ver esto, pero para mí fue algo que no lo puedo describir con palabras. Mi compañero y yo vivenciamos todo eso. Si fuera polvo o agua tendría que haber salido en todas las fotos, pero en determinados sectores era menor su presencia.
Fuimos testigos también de uno de los problemas del cruce: su mal estado. Un ómnibus de larga distancia, de doble piso y con su pasaje completo, quedó estancado en un bache inmenso, por lo que el peso del coche no le permitía salir de él y tuvo que realizar varias maniobras de avance y retroceso para seguir su marcha, tardando varios segundos, segundos que podrían ser mortales si pasaría el tren en ese momento. La falta de iluminación en el cruce también no favorece para nada.
Lo único que uno siente también es la sensación que provoca el estar allí. Me puse sobre las vías y tome varias fotos en dirección este en primer lugar, y después oeste, en dirección a donde se dirige el convoy ferroviario y me puse a pensar la cantidad de autos, camionetas y camiones que fueron arrollados y arrastrados hacia esa profunda oscuridad, en la noche o madrugada, en un lugar tan desolado y donde los gritos de dolor y la muerte quedaran grabados por siempre.
Otras fotografías inexplicables nos dejaron perplejos por lo captado. Ni nosotros podemos explicar lo que se ve.
