La Comisión de Preservación y Defensa del Patrimonio Urbano de Rafaela había resuelto incorporar al listado de Bienes Protegidos a los edificios del Policlínico Rafaela, Banco Santa Fe, Templo Sagrado Corazón de Jesús, Escuela Técnica "Guillermo Lehmann", Escuela "Manuel Belgrano" y Casa Frossi, por considerarlos "edificios representativos del pasado de la comunidad”.
Ahora, un nuevo decreto dispuso sumar un nuevo ítem a ese listado, aunque no es una edificación en concreto, sino que es un “bien intangible”: Se trata de la “Trayectoria Automovilística” de Rafaela, al considerarla parte de la identidad rafaelina.
En los considerandos de la resolución firmada por el Intendente Luis Castellano, se destaca que la ciudad, desde sus orígenes, estuvo caracterizada por el florecimiento de industrias vinculadas a la producción agrícola-ganadera, pero también de aquellas del complejo metalmecánico y automotriz.
Éstas últimas, junto a comercios y servicios vinculados a los autos, le fueron dando forma a una “identidad fierrera”, con el Autódromo “Ciudad de Rafaela” como principal atractivo, donde se lograron algunas de las hazañas deportivas más importantes de la historia automovilísticas del país, como las recodadas 500 millas argentinas o la llegada de las 300 Indy, entre otros logros que le dieron el título de “Templo de la Velocidad”.
Asimismo, esta incorporación también se considera una reivindicación de la vida y obra de grandes hacedores de la cultura tuerca, como Oreste Berta o Jorge Ternengo, entre otros.
A partir de esta declaración, fechada el 17 de marzo pasado, Rafaela avanza un paso más en la preservación de la memoria urbana, contribuyendo a mantener viva la identidad de la ciudad.