El sábado de Festival comenzó la tarde con una propuesta para las infancias y terminó con una obra que, combinada con el humor, nos hizo reflexionar sobre nuestro rol en la sociedad.

Debido a las condiciones climáticas, la propuesta teatral prevista, “Chachisca”, se tuvo que realizar en la Escuela Centenario (Normal). Con una alegría inmensa y con un trabajo donde se reflejó el esfuerzo, disfrutamos de las actuaciones de Chapa, Chispita y Cartón.

El juego entre las actuaciones de los protagonistas junto al público, le ha dado una alegría distinta. La felicidad de los más pequeños de disfrutar el show ha sido satisfactoria de observar.

Sin embargo, debemos destacar que es una obra en construcción, se siguen puliendo distintos puntos del desarrollo de la trama. Pero, nada quita la alegría con la que los niños y niñas disfrutaron del espectáculo.

Prosiguiendo en la tarde, el Aula C del C. C. Viejo Mercado fue locación de la obra “Misterio”, de Silvina Grinberg. Esta obra, “es un trabajo de biodrama sobre una obra de danza teatro llamada Magnética Fe presentada en el año 2018. Narra los avatares de un grupo de artistas que se proponen mantener viva una obra con 4 intérpretes menos. Será un niño de 13 años quien nos conducirá desde su imaginario, al intento de develar los acontecimientos y misterios que condujeron la pieza al fracaso”.

El desarrollo estuvo muy bien interpretado, se notó en escena las técnicas teatrales utilizadas por parte de Ciro Berrón, Juan Berrón y Pablo Vallejo. Sin un desarrollo fijo, el hilo conductor fue la fantasía y el imaginario de Ciro, el más joven de los protagonistas. A su vez, destacarlo por su actuación, consideramos valiente llevar adelante una obra siendo el único que narra vocalmente.

Prosiguiendo con la tarde, la concentración tuvo lugar en el Cine Teatro Belgrano con la presentación de la Mistonga y su espectáculo “De Sobremesa”.

La murga rafaelina dejó una huella con los presentes, el símbolo de protesta que han elevado fue muy bueno. Hasta podríamos afirmar que era necesario para la ciudad.

Cultura

El arte y la protesta local hecha carnaval

Por otro lado, el sábado volvimos a tener un encuentro en el Museo de la Usina Municipal con “Proyecto Migrante”, de Ignacio Tamagno. “Ignacio viaja a Dinamarca con una visa working holiday y la promesa de un nuevo trabajo, pero al llegar se encuentra con la nada misma. En la oscuridad de un búnker nazi conoce a Diego, un refugiado sirio fanático de Maradona. Juntos transitan el invierno nórdico y las calles vacías de un pueblo fantasma. Hasta que una noche (blanca) deciden cambiar su destino. Pero entonces todo, o casi todo, les sale mal”.

Las actuaciones de Petra Banke e Ignacio Tamagno fueron deslumbrantes, acordes a lo que la obra exigía. Sus interpretaciones nos dejaron pensando, logramos adentrarnos a los sentimientos del protagonista. La sensación generada fue muy grande, es impreciso catalogarla en una sola, fueron distintos los picos emocionales que transitamos, esto es lo más destacado de la pieza teatral.

A su vez, la asistencia técnica de Estefanía "Tati" De Gennaro fue maravillosa. El montaje en escena nos fue acompañando en las sensaciones. De Gennaro logró que, mediante el acompañamiento técnico, los sentimientos de los personajes hagan un match con el público presente.

Saliendo de esta obra, seguimos en la línea de sensaciones donde concurrimos al Teatro Lasserre con la presentación de Rota, de Natalia Villamil y la dirección de Mariano Stolkiner.

“Una mujer pugna por reconstruir su existencia tras la muerte de su hijo, quien se suicidó luego de matar a su novia. En su soledad, intentará rearmar el rompecabezas de su cuerpo. De la mano del recuerdo se despliega el sin sabor de la pérdida. Al detenerse, en ese instante, vislumbra su rotura”.

La obra impacta desde el primer momento, el unipersonal que realiza Raquel Ameri, nos deja perplejos con cada segundo que pasa. El acompañamiento lumínico y la idea de sonido han hecho que sea dinámica, conmovedora, y que quede en la retina de quien la observó.

Un trabajo muy bien realizado, la coordinación que existe entre las personas del equipo es magnífica. Lo más destacado fue el desempeño técnico de iluminación, cada movimiento quedó coordinado a la perfección. Felicitamos a todo el equipo por lograr esta obra de teatro y su mensaje conmovedor.

Finalizando, la noche terminó en el Centro Cultural “La Máscara” con la presentación de The Big Mountain, de Braian Kobla.

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El craquelado de la sociedad