Según un análisis reciente de la Unión Industrial Argentina (UIA), la competitividad de la industria nacional se ve seriamente afectada por la alta presión tributaria que enfrenta el sector formal de la economía. Este fenómeno se observa en los tres niveles de gobierno y se agrava por la acumulación de saldos a favor en los impuestos nacionales y provinciales, lo que eleva la presión fiscal por encima de lo que corresponde tributar. Además, la creación de nuevas tasas municipales empeora la situación.

El informe destaca que el sector privado, en muchos casos, se ve obligado a financiar al sector público debido a la falta de devolución de los saldos a favor. Esto genera costos financieros y administrativos adicionales para las empresas, reduciendo su capacidad de destinar fondos a los gastos operativos de la producción y el empleo. Además, los saldos retenidos desfinancian a las empresas y aumentan el costo de los productos.

Para mitigar este problema, la UIA propone la creación de una Cuenta Única Tributaria, que permita la devolución ágil de saldos o su utilización para compensar otras obligaciones impositivas, aduaneras o de seguridad social. También recomienda revisar los Regímenes de Recaudación y eximir a las pymes de la obligación de actuar como agentes de retención y percepción de impuestos. Por último, sugiere alcanzar un consenso fiscal entre los tres niveles de gobierno para lograr estabilidad fiscal y eliminar los saldos a favor que afectan a las empresas.