El reciente informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas, difundido por la Bolsa de Comercio de Santa Fe, analizó el impacto de las condiciones ambientales en la campaña agrícola 2024-2025 para el Centro Norte de la provincia. Esta región abarca 12 departamentos, incluidos Castellanos, 9 de Julio, San Cristóbal, San Martín y Las Colonias, donde la actividad agrícola enfrenta un panorama diverso debido a las inestables condiciones climáticas.

Soja temprana y tardía

La siembra de soja temprana, con una intención inicial de 1.065.000 hectáreas (7 % menos que el ciclo anterior), se encuentra paralizada en un 15 % debido a lluvias persistentes que dificultaron el acceso a los campos y la transitabilidad en caminos rurales. A pesar de ello, los cultivos implantados muestran buenas condiciones de germinación y crecimiento gracias a la recuperación hídrica en los suelos.

Ante esta situación, la intención de siembra de soja tardía se ajustó alza en 20.000 hectáreas, alcanzando una proyección de 600.000 hectáreas.

Trigo y girasol

La cosecha de trigo se encuentra totalmente detenida en los departamentos restantes debido a la saturación de suelos y la falta de accesibilidad, lo que ha complicado el proceso. En contraste, el girasol presenta buenas condiciones generales. Sin embargo, en el norte de la región, la alta humedad afectó el trabajo de los polinizadores, lo que podría impactar en la productividad de algunos lotes.

Maíz temprano y algodón

El maíz temprano muestra un comportamiento dispar. Mientras algunos lotes, sembrados en ventanas óptimas, alcanzan etapas avanzadas como la floración o el cuaje, otros presentan retrasos de 20 a 25 días por la falta inicial de humedad. En cuanto al algodón, las lluvias intensas detuvieron la siembra, aunque los lotes ya implantados muestran un desarrollo satisfactorio, con problemas localizados de emergencia por exceso de agua.

Balance hídrico

Las precipitaciones recientes mejoraron significativamente la disponibilidad de agua útil en los suelos de los 12 departamentos del área de estudio, proporcionando una base favorable para los cultivos en desarrollo. No obstante, las condiciones climáticas adversas han condicionado las decisiones agronómicas tanto para la cosecha fina de 2024 como para la gruesa de 2024-2025.

Este complejo escenario resalta la importancia de la planificación estratégica y el monitoreo continuo para enfrentar los desafíos climáticos y maximizar los rendimientos en una de las regiones agrícolas más importantes de Santa Fe.