“Hace apenas 144 días juré en este recinto, hace apenas 91 días hábiles, debamos inicio a un proceso de construcción política gubernamental, que luego de una extensa transición, entendí que iba a atravesar los avatares propios de los comienzos de un modelo de gestión, en el que los valores que emanan de una democracia consolidada nos acompañarían sin otros márgenes que las propias tensiones que los cambios de signos políticos traen consigo.
Tensiones razonables que atraviesan los diferentes modos de llevar adelante las acciones de gobierno y que en el marco del respeto a la institucionalidad nos permite coincidir o disentir sin que eso sea entendido como una ofensa a las voluntades de quienes se expresaron en las urnas de uno u otro sentido.
Puedo decirles sin temor a equivocarnos que el 10 de diciembre del año pasado cuando juré, nunca imaginé que hoy, al dar inicio a este año legislativo, el universo simbólico que me iba a rodear iba a ser este. En diferentes ocasiones salude los desafíos de gobernar una provincia con dimensiones de país, una provincia que abarca territorios diversos y heterogéneos, distancias enormes y geografías que hablan de su riqueza y potencial. Parajes solitarios que conviven con urbes poderosas, mujeres y hombres que se definen en su horizonte junto a otros y otras que se construyen fuera de sus límites, pero no olvidan la tierra que los vio crecer.
Inicié mi vida política, muy joven, y las situaciones que me tocaron atravesar no siempre fueron favorables para quienes entendemos que el desarrollo y la expansión productiva son las matrices desde donde se pueden anclar los procesos de crecimiento económico, laboral, educativo, cultural y social. Y con ellos, dar contención y amparo a las demandas que el siglo XXI nos reclama. Me forme siendo parte de un movimiento que incluye, aún, en las diferencias coyunturales, que comprende los matices y los suma, que corrige sus perspectivas y ha demostrado llevar adelante con audacia y eficacia, tiempos turbulentos, aconteceres locales e internacionales que pusieron a prueba la capacidad de sus dirigentes y la templanza de quienes nos acompañaron.
Como hombre de mi tiempo y sujeto de una contemporaneidad que fluye controversial y no siempre pacífica a la hora de tomar decisiones, supe de dilemas y de encrucijadas, nadie está exento de ellas. Si se me permite ser interpelado por nuevas formas de construir los diálogos y consensos, que aún en las dificultades implican un salto cualitativo a la hora de ejercer el poder. Valoro las exigencias, los reclamos de quiénes no coinciden con mi mirada y acerca, de cómo llevar adelante una gestión de gobierno. Y al mismo tiempo asumo la responsabilidad que eso implica cuando los contextos no son auspiciosos.
Pero hoy, primero de mayo de 2020, un día cargado de sentido, para quienes creemos que el trabajo es el gran ordenador de la vida colectiva de nuestro pueblo, voy a compartir con ustedes, algunas cuestiones que creo insoslayable, señalar y comprender en este nuevo escenario mundial que nunca imaginamos iba a ser el rector de nuestras acciones y de nuestras decisiones.
Esta pandemia anunciada y no contemplada, el cambio de paradigma universal, el dilema entre la salud y la economía, la reconfiguración del rol del estado, y el nuevo sentido de la democracia y los mecanismos de control social, la refundación en clave plural, el rol de nuestros mayores, las mujeres y los jóvenes, el cambio climático y las emociones.
Santafesinos y santafesinas, legisladores y legisladoras, los presentes y quiénes nos están siguiendo de manera remota, a todas las autoridades, representantes de la sociedad civil, a todas y a todos, muy buenos días. En este primero de mayo quiero agradecer el esfuerzo, el compromiso, el trabajo de todos, que hacen posible que la provincia de santa fe, esa provincia que sigue en marcha aún, en situaciones complejas, como las que estamos viviendo.
Tengo este nuevo período de sesiones ordinarias del poder legislativo de nuestra provincia, en un contexto, totalmente excepcional. Esta pandemia desatada por el coronavirus, ha modificado de forma dramática la vida en el mundo, en nuestro país y en nuestra provincia. Ese mal, que desde el principio de año veíamos por los noticieros y diarios en países lejanos, irrumpió en nuestras vidas cotidianas rompiendo nuestra idea de normalidad, pero el tiempo, que trastoca por completo prioridades, personales y organizacionales, en esta crisis sanitaria global, también pone en valor la importancia del rol del Estado en todos sus niveles. Un Estado que debe estar presente y más fuerte que nunca, para proteger la salud y la vida de las personas, un Estado que debe ser creativo e innovador para hacer frente a los múltiples desafíos en curso, desde potenciar, la capacidad de respuesta de los sistemas de salud, hasta poder mitigar los esfuerzos de la economía y brindar contención social, especialmente a los más vulnerables.
Todo esto nos encontró en medio de un arduo trabajo, tratando de poner en pie y ordenar la provincia. Atravesada por dificultades económicas nacionales y que repercutieron en nuestra provincia, por eso, digo que tengo bien claro que nos eligieron para mejorar la seguridad, para hacerle frente al delito organizado, para que todos los chicos y las chicas estén estudiando en la escuela, para preparar a nuestros jóvenes para el trabajo del futuro, para tener un boleto educativo gratuito, para conectar a toda la provincia, para hacer una transformación productiva apoyada en la economía del conocimiento, que genere más empleo, fortalezca a nuestras pymes, aumente nuestras exportaciones y podría seguir porque sé muy bien, a qué nos comprometimos cuando asumimos. Sin embargo, tal como les sucediera a todos los países del mundo, la gravedad de la crisis sanitaria, nos obligó a priorizar la vida de nuestra gente.
Para comprender el impacto de la pandemia del coronavirus, me parece útil, compararla con algunas situaciones que todos hemos conocido por haberlas vivido en carne propia, o bien, por verla en seres queridos o cercanos, sabemos que aquellas personas a las que se les diagnostica una enfermedad grave, suelen hacer dos cosas, primero, todo lo que está a su alcance para sostener la vida, segundo un profundo examen de su vida, así, inexorablemente se preguntan, pasé por delante cosas importantes, estuve demasiado dedicada o dedicado, a cuestiones que frente a esta situación límite, me parecen irrelevantes? Hoy la pandemia hace que la humanidad en su conjunto esté colocada en una situación similar, todos estamos luchando por preservar a la vida, y a la vez, nos hacemos un montón de preguntas.
Ninguno de nosotros será el mismo después de la pandemia, la mayoría de nosotros va a vivir pero ya no seremos los mismos.
Lo primero es preservar la vida, el avance de este virus, sin ningún tipo de excepción, nos obliga a entender que nadie se salva solo, por eso, todos los esfuerzos que estamos llevando delante de manera coordinada con la Nación, con los gobiernos municipales y comunales, a todos ellos, mi profundo agradecimiento, por la labor que están llevando adelante para prevenir el virus.
El país y la provincia de Santa Fe estaban preparados para un escenario tan crítico como el que estamos enfrentando, desde la decisión del presidente, tomando los consejos del ministerio de Salud y el comité de especialistas que asesoran al presidente, venimos afrontando diversas políticas públicas, para hacer frente a la pandemia y para paliar el impacto social que afecta a miles de trabajadores, empresas y familias.
Por eso a continuación quiero contarles los aspectos centrales de las más de 100 medidas que venimos realizando para hacer frente a la pandemia y palear el impacto social y económico.
Las imágenes muestran algunas reuniones que venimos teniendo desde el principio, para ordenar el trabajo en la provincia de Santa Fe.
Reuniones que tuvieron a los expertos, una primer reunión con Mirtha Roses, una santafesina, en su momento titular de la Organización Panamericana de la Salud, hoy representante de la OMS, así se fueron estructurando con esa directivas nacionales, también en Santa Fe, con la riqueza y la virtud de poder contar con profesionales, expertos, epidemiólogos, ex ministros, poniendo todos ellos, la mejor disposición para una acción común.
Quiero remarcarles hoy algunas cosas que se decidieron en estos días, una de ellas, es el armado de un 0800, un call center, que fue el famoso 0800 555 6549 para consultas médicas. Empezó a funcionar el 13 de marzo, una medida clave, temprana para el control de casos, el control de aislamiento domiciliarios y la contención de vecinos para que no se vaya masivamente a nuestros hospitales, nos permitió ordenar y centralizar la información. Ya se respondieron más de 60 mil llamados, el 66% de los casos confirmados fueron detectados por este medio. Es decir que el 66% de los positivos llamaron al 0800 y a partir de ahí se generó todo el procedimiento para ir a su domicilio y tomar las muestras ahí, sin que hayan tenido que recurrir a un centro de salud.
La convocatoria al comité de expertos y el agradecimiento a los infectólogos, a los directores de los hospitales, los representantes de los colegios de bioquímicos y farmacéuticos, los científicos del conicet, los representantes de universidades, los ex ministros, los titulares de los gremios, los prestadores de salud privada, las autoridades municipales, donde hemos tenido l posibilidad de escuchar y de intercambiar opiniones fundamentales para el avance de la estrategia.
Conformamos el comité de coordinación en el que participa activamente la señora vicegobernadora, el señor presidente de la cámara de diputados y los ministros de las áreas vinculadas a la acción del coronavirus, la intención allí ha sido centralizar la emergencia para aumentar la velocidad de ejecución, en cada uno de los departamentos, coordinándolos con los senadores, con los municipios y las comunas. Quiero aquí hacer un especial reconocimiento a la tarea de cada uno de los 19 comités de emergencia que se han armado en cada departamento con la presidencia de los senadores, la participación de diputados, de todos los intendentes y presidentes comunales, pero también de entidades intermedias.
Realizamos intercambios de experiencias internacionales, buscamos tratar de saber qué pasaba en otros lugares, conectándonos con los mejores, los que más saben, hubo videoconferencias, con provincias chinas, habrá una nueva con el estado Baden-Wurtemberg en Alemania, información profesional valiosa de quiénes ya han estado en la primera línea, este grupo de expertos, ese comité central de organización, los de cada departamento y el 0800, son pilares sobre los que sustentamos la gestión de la pandemia. Creemos firmemente en el pleno despliegue del estado provincial, nacional y cada municipio y comuna que nos permite llegar cerca de la gente, en tiempo real, y con la mejor organización y coordinación posible.
Establecimos desde el primer momento y previo, la obligatoriedad de la cuarentena de 14 días para todos los santafesinos, sin distinción del país del que venían, incluso Chile y Brasil que no estaban incorporados. Identificamos y monitoreamos, 27379 viajeros santafesinos que regresaron desde el exterior el 1 de marzo, después de Capital Federal la provincia con mayor cantidad de ciudadanos que estaban en el exterior, permanecen todavía 846 en cuarentena, por haber regresado de ese viaje.
Quiero destacar aquí el rol de la Casa de Santa Fe, el rol de Migraciones Nacionales, que tuvieron una acción de acompañamiento y seguimiento importante para que cada santafesino y santafesina que se encontrara fuera de la provincia, ya sea en la Argentina o fuera del país pueda encontrar un nexo. Tenemos todavía santafesinos fuera del país, fuera de la provincia, la Casa de Santa Fe ha recibido muchas comunicaciones de legisladores nacionales y provincial, si sigue habiendo algún santafesino que no ha tenido comunicación, ese es el nexo para hacerlo, para acompañarlo en su regreso a casa.
Previo al aislamiento que se definió el 19 de marzo, tomamos algunas decisiones, cómo el cierre de la frontera limítrofe con Chaco, restringir la circulación con Santiago del Estero, y tuvimos que aislar la primera localidad del país, que fue Ceres. Decretamos también el cierre de los espacios culturales, los shopping, los casinos y los lugares de actividades recreativas y deportivas.
Allí el 19 de marzo, en Olivos, en el presidente de la Nación comunica y decidimos acompañar plenamente con todos los gobernadores esa decisión de decretar el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Sin duda fue una medida muy acertada la del presidente de la Nación.
Y a partir de ese establecimiento hubo que reforzar medidas de control, controles para el cumplimiento del aislamiento, que no fueron sencillas. Casi 23 mil aprensiones, 13700 controles de tránsito de pasajeros, 1800 vehículos secuestrados. No es un tema menor, no ha sido algo grato, pero tenemos que tener claro que había más de un 90% de los santafesinos que acompañó y merecían frente a muchos de ellos, al realizar denuncias y al exigir el mismo trato, que se tuviese que actuar con esa firmeza.
También hubo que instalar puestos de controles viales, y se hicieron 125 en todo el territorio provincial, 57 en la zona centro norte, 58 en la zona sur; y tenemos fundamentalmente 17 puestos interprovinciales controlando la circulación con las poblaciones limítrofes: Chaco, Córdoba, Entre Ríos, Buenos Aires y Santiago del Esto; y fundamentalmente con los camiones que allí circulaban. Esto nos generó, y lo digo hoy con al distancia, algunos ruidos con algunos intendentes y presidentes comunales que sin duda de buena fe y en su celo por cuidar sus comunidades procedieron al corte de rutas. Se pudo normalizar, acordar y charlar y se pudo demostra claramente desde esos días hasta aquí que podemos tener el mismo resguardo garantizando el control de lo que son de las actividades esenciales, de abastecimiento, de alimentos, combustibles y elementos sanitarios.
Tenemos los recursos, hospitales y ambulancias, y todos los laboratorios que en la provincia existen, están al servicio de los santafesinos y santafesinas. Nuestro sistema de salud sin embargo lo definimos como uno solo y el Estado es el responsable de ordenarlo, cada vez que teníamos un invierno colapsaban o teníamos serias dificultades en nuestras terapias con las patologías propias de la época. Las camas criticas nos complicaban y no daba ha basto en muchas regiones.
Imagínense lo que hubiese sido si teníamos coronavirus como tenemos hoy.
Fue necesario realizar una coordinación entre lo público y lo privado para poder en esa primera instancia, apoyarnos en un sector que tenía un mayor desarrollo de camas críticas y después tomar otro tipo de medidas.
En coordinación con la Nación, uno de los hospitales móviles, modulares, que definió hacer la Nación se hizo aquí en Santa Fe. Las imágenes que ustedes ven corresponde a los que está prácticamente terminado allí en Granadero Baigorria, montando un hospital modular que la semana entrante comienzan a instalarse ya las 26 camas de terapia intensiva y 52 camas de internación, más los boxes de aislamiento.
Se siguió trabajando para finalizar la obra de la guardia nueva en el hospital de Niños en la Zona Norte de Rosario, se acondicionó el samco de Villa Guillermina y se le sumó equipamiento, el hospital viejo de Reconquista fue refuncionalizado ha fin de poder tener un mayor aprovechamiento del mismo, cómo centro de aislamiento pero también para aprovecharlo con camas críticas.
Se prepararon tres nuevos efectores de salud que se irán incorporando el personal a medida que sea necesario, y ya se fue colocando en equipamiento en el hospital de Coronda para 60 camas, en el viejo hospital Iturraspe, sumando 82 nuevas camas, con oxigeno terapia y con internación general; y hemos dispuesto de la clínica de Sagrada Familia en Santa Fe mediante una expropiación temporaria, sumamos allí 48 camas generales y 4 camas críticas.
La habilitación de estos espacios nos va permitiendo en la reorganización también aumentar la disponibilidad de camas, y al día de hoy tenemos un 64% de camas críticas, que hemos incrementado.
Cuando comenzamos contábamos con 150, hoy tenemos 247, de las cuales ya 221 cuentan con respiradores. Ampliamos así 71 camas con respiradores distribuidas equitativamente en las cinco regiones de salud, en Reconquista el 15%, en Santa Fe 17%, en Rafaela el 15%, en Venado el 14% y en Rosario el 38%.
Entre el sector público y privado la provincia cuenta hoy con 914 camas críticas, y seguirá creciendo con las camas al incorporar el hospital modular de Baigorria y la llegada de nuevos respiradores.
Cabe aquí una decisión importante que tomó el gobierno nacional de centralizar todas las comprar de ese equipamiento con producción argentina, de prohibir las exportaciones nacionales y destinar toda esa producción a los argentinos.
Todas las semanas estamos recibiendo rigurosamente respiradores y este fin de semana estaremos sumando en la provincia de Santa Fe 20 nuevos respiradores.
La preocupación de los expertos era comenzar lo antes posible los análisis de coronavirus aquí, en Santa Fe, los primero 38 análisis se realizaron en el Malbran, y sentíamos la necesidad y estábamos en condiciones en la provincia de poder hacerlos, por equipamiento, por la capacitación de nuestra gente. Esa autorización llegó con los reactivos que consiguió la Nación y así empezamos a tener en dos centros a partir de los cuales se fueron haciendo los análisis, el Cemar en Rosario y el laboratorio central en Santa Fe.
Al día de hoy hemos hisopado 4478 personas para su análisis posterior, estamos realizando un promedio de entre 120 y 150 análisis diarios. Desde el primer día tuvimos con ustedes una instancia de comunicación directa y oficial, transmitiendo la información sobre los casos analizados, descartados y confirmados, siempre la información fue elevada y comunicada.
La transparencia es un sector crítico en estas instancias, contar con información precisa y clara es fundamental para poder tomar medidas acordes en cada punto de la provincia. Informes públicos y concretos son pilares para entender la complejidad de lo que estamos viviendo y trabajar en la búsqueda de soluciones.
Estamos coordinando también con el sector privado como garantizar los traslados de todas las localidades de la provincia, contamos con 219 ambulancias de alta complejidad en el sector público para trasladar a pacientes críticos y estamos en la recuperación de otras 99 que estaban sin funcionar.
No sé si ustedes habrán visto en una de las placas los centros de aislamiento, pero uno de los principales desafíos de esta pandemia es generar nuevos espacios para los casos confirmados con síntomas leves, reforzando el control epidemiológico para evitar la saturación del sistema sanitario.
Al inicio de la pandemia, compartimos con ustedes los escenarios que el Ministerio de Salud elaboró, elaboró 4 escenarios, tomando esto como base estimamos que la provincia iba a necesitar 4 camas no hospitalarias cada mil habitante, esto se iba a dar en el momento pico, teniendo en cuenta que deben permanecer 14 días allí.
Dada que la situación es dinámica nos propusimos que este 30 de abril tener la mitad de ellas funcionando. Y eso ha ocurrido, tenemos la mitad de esas camas en pleno funcionamiento, y van a seguir incrementándose en función de los avances de la pandemia.
En esto poder coordinar una estrategia común con esos centros de aislamiento en los comités ha sido fundamental el trabajo de cada uno de los senadores, los intendentes y presidentes comunales. En tal solo 6 semanas se montaron 278 centros de aislamientos no hospitalarios y 6500 camas listas y otras 1590 en preparación distribuidas en esas 278 localidades.
Quiero ser claro en esto el 80% de los contagiados, de quienes den positivo, son casos leves no van a necesitar internación y se aislarán en centros de aislamiento o en su vivienda si tienen espacio y disposición, si no hay un lugar en su casa para que puedan estar aislados para eso exiten los centros de aislamiento.
El 80% son casos leves, el 15 debe ser atendido en hospitales, en una sala general en una cama general, y el 5% demandará cuidados críticos, es decir la internación en las camas críticas, con terapias intensiva y respiradores.
Es fundamental por ello tener respiradores. Si. ¿Es bueno tener las terapias intensivas? Si. ¿Es bueno tener los centros de aislamientos? Seguro que sí, pero es mucho mejor cuidarnos para no contagiarnos, es mucho mejor comportarnos y tener la conducta como santafesinos para dejar siempre el distanciamiento social, el agua y jabón, y el uso de barbijo social o tapa bocas.
¿Cómo estamos de equipamiento? Y esta es una de las cosas que nos preguntan, cómo estamos con material para nuestro personal. Tenemos hasta aquí una provincia que no tenía una provisión de insumos, uniformes y demás elementos de protección personal.
El tiempo nos ha permitido mejorar y organizar, lo mismo que veíamos antes, de sumar respiradores, centro de aislamiento, de ganar tiempo para sumar uniformes, es lo que le debemos el enorme agradecimiento al pueblo santafesino que en más de un 90% acató las medidas de aislamiento. Eso es lo que nos permite ganar tiempo, y salir a buscar todos los uniformes que pueda haber en la provincia y el país.
¿Alcanza con esto? No, hubo que hacer compras en el mercado interno, todos están detrás de lo mismo, todas las provincias, todos centros públicos o privados, están detrás de lo mismo; ello lleva a buscar opciones internacionales.
¿Todos los países tienen opciones para vender y ser proveedores? Tampoco, creo que ustedes saben que estos insumos están concentrados hoy en China, todos hemos visto o escuchado sobre los aviones americanos, brasileros, alemanes, italianos y españoles, buscando estos insumos en China.
Es una dificultad para Argentina que estos países desarrollados estén buscando al mismo tiempo lo mismo que nosotros. Por eso de la misma manera que valoramos que el gobierno nacional concentró la compra de los equipos de respiración nacional, prohibió su exportación, en esta instancia tomada la decisión de la provincia de Buenos Aires y del gobierno nacional de iniciar un operativo de compra en China con Aerolíneas Argentinas, la provincia de Santa Fe va a sumarse al mismo.
Tenemos respiradores que envió Nación, hemos crecido en equipamiento, vamos a reforzar con el equipamiento que se traerá de China, hemos reforzado también con producción del LIF la faltante de alcohol, y también con algunas producción locales, porque es bueno agradecer que nuestras empresa, muchas de ellas reconvirtiéndose, otras con el apoyo de las universidades, se pusieron al servicio del sistema de salud.
Cooperativas, fábricas, talleres textiles, adecuaron su producción para estar fabricando barbijos, batas, con telas adquiridas por la provincia. Ya están fabricando todo lo que pueden: 400.000 barbijos, 20.000 batas destinadas a nuestro personal, 6 empresas trabajan en la eyección de plástico para fabricar máscaras faciales en Santa Fe, en Pilar, en Rafaela, en Rosario. Todas ellas alcanzan ya una producción superior a las 9.000 máscaras por día. Los próximos meses esa demanda seguirá creciendo y, por lo tanto, vamos a seguir incorporando pymes y emprendedores a estas dinámicas.
Pusimos al día las viejas deudas con los hospitales, con los Samcos, con los proveedores de insumos, para garantizar una fluidez en la provisión de los insumos críticos y también, aprovechando la creatividad de los santafesinos y santafesinas, creamos un banco de capacidades e innovación, que ya cuenta con 150 ideas del sector científico tecnológico y del sector industrial, orientadas a brindar soluciones frente a la pandemia.
Tenemos 4 santafesinos en los equipos ganadores de Argentina Hackea al Covid 19, una competencia nacional para encontrar soluciones innovadoras a la pandemia.
Tenemos, les decía antes, esfuerzo por mejorar la infraestructura, por mejorar los respiradores, por mejorar las camas críticas, por mejorar los centros de aislamiento, pero de nada de eso sirve si no contamos con el personal de salud preparado para operarlo. Para ello, comenzó un programa de capacitación de médicos, de enfermeros y de todo el personal de salud, que incluye las enseñanzas técnicas de ventilación mecánica a pacientes con coronavirus en diferentes estadios. Capacitamos en sala de simulación que funcionan en Santa Fe y en Rosario, donde asisten a las distintas localidades de la provincia y también desde las videoconferencias se dieron cientos de capacitaciones.
En el pico de la pandemia vamos a necesitar mayor personal de salud. Entonces abrimos la convocatoria a enfermeros, médicos, kinesiólogos. En 5 días tuvimos 5.000 inscriptos, los mismos son evaluados, capacitados e incorporados en la medida que se los vaya requiriendo.
La disponibilidad y capacitación del personal de salud es fundamental, ya que permite tener una segunda línea preparada para responder cuando estemos travesando los momentos más críticos.
Adelantamos la campaña de vacunación antigripal, 320.975 dosis, desde el 28 de marzo al 28 de abril. Se vacunó un 68% más que el año anterior. Esa estrategia de vacunación para la población en riesgo, en la mayoría de las localidades, se realizó casa por casa; en otras en espacios abiertos y en centros barriales.
Tenemos que hacer un análisis muy profundo porque no estamos satisfechos en todo lo hecho en la lucha contra el dengue. Sin duda nos queda allí una instancia pendiente donde todos debemos mejorar. Provincia, municipios y comunas, sin dudas todos debemos allí prevenirlo de otra forma y, sin dudas, será uno de los desafíos pendientes.
Desde el comienzo nos encontramos con una provincia, les decía, atravesada por la crisis social y económica. Contamos hoy con leyes que nos permiten asistir a la provincia sobre esa crisis heredada y con un aporte para enfrentar la pandemia. Los momentos de búsqueda a ese financiamiento no son los adecuados, todos conocen las restricciones del mercado. Hemos priorizado para ello la búsqueda de fondos en la lucha contra la pandemia y, a partir de allí, hemos solo hasta aquí conseguido los primeros 5.000 millones de pesos aportados por el Nuevo Banco de Santa Fe. Seguiremos en esa búsqueda de financiamiento que es clave, no solamente para la lucha contra la pandemia, sino para mantener el Estado activo y el apoyo a municipios y comunas. Antes de contar incluso con este financiamiento, la estructura primaria para nosotros de cercano a la gente que son los municipios y comunas, nos llevó a crear allí un fondo de mil millones, 365 municipios y comunas, 365 brazos ejecutores de una política provincial, queremos afirmar claramente la descentralización en la provincia. Y hoy, más que nunca, esto está a prueba y confiamos plenamente en esta estructura de funcionamiento.
Allí tendremos, les decía, un fondo de 1000 millones de un máximo de tres mil, para llevar los primeros recursos a estas actividades que cada uno de ellos lleva adelante y ha puesto en marcha, muchos a los controles a su comunidad, las actividades de sanitización, en el uniforme para su gente, realmente han sido muy cuidadosos. Y vuelvo a repetirlo, porque hemos conversado mucho con ellos, muchas videoconferencias, muchas idas y vueltas en las preguntas. ¿Coincidimos en todo? No, salvo en una cosa: todos queremos cuidar a la gente de la mejor manera, no somos todos del mismo partido, pero estamos todos trabajando codo a codo y esto realmente es excepcional por lo que se puede conseguir, por lo que se puede estar dando de una manera unida, la mejor batalla que tenemos hasta aquí.
Ya llevamos transferidos más del 36% de esos montos y tenemos fundamentalmente continuar en la medida que cada uno de ellos vaya comenzando el uso de las camas de aislamiento. La primera que se ha utilizado ha sido en la localidad de Venado Tuerto, ha sido en el día de ayer. Una primera utilización de una de las camas leves conformadas en estos centros de aislamiento.
La realidad de organizar a los municipios, a las comunas para dar la lucha contra la pandemia y, fundamentalmente, en la organización, trabajar con cada uno de los barrios en un programa de fortalecimiento alimentario, en particular en las dos grandes ciudades. Pedíamos y exigíamos un cumplimiento alto de ese aislamiento, debíamos ser conscientes que debíamos estar asistiendo a muchos sectores que se ganan el día a día para poder alimentarse. En eso se trabajó codo a codo junto a las parroquias, a los comedores comunitarios, a los pastores, a Cáritas, a los bancos de alimentos, a la municipalidad de Santa Fe y a la municipalidad de Rosario, a todos los movimientos sociales y agrupaciones que trabajan en cada uno de esos territorios. Juntos fue la mejor forma de poder empezar a organizarnos y tratar de que no nos quede una sola vivienda sin el apoyo alimentario necesario para esos días.
La instancia de distribución contó con el inestimable aporte del Ejército Argentino, se lo hemos agradecido al ministro Agustín Rossi, presente aquí, junto a los jefes del Ejército que pusieron a disposición toda la logística que nos facilitó enormemente la tarea en las dos ciudades.
En cada una de las ciudades y pueblos del interior se reforzó los aportes, se reforzaron los recursos para que allí se hicieran las compras. Es decir, para poder fortalecer en cada uno de los pueblos la asistencia a cada una de las familias. Se resguardó especialmente a los comedores escolares, que cambiaron las raciones a módulos familiares, para que la familia de ese chico sea la que se lleve el alimento y no solamente una ración.
Hubo gestiones, pedidos, que trasladamos al Gobierno Nacional, de muchos santafesinos y santafesinas que no están habituados a un bolsón, a una asistencia alimentaria, a asistir a un comedor. Allí surgió un programa, el de Ingreso Familiar de Emergencia, el IFE, y acompañamos a muchos santafesinos y santafesinas para poder ser parte. Decirles a ustedes que, desde esas acciones, la Nación toma la decisión de estar fortaleciendo la presencia territorial con ese origen. Y podemos remarcar que hoy, en la provincia de Santa Fe, entre los más de 200.000 niños atendidos por la Tarjeta Alimentar, los 608.000 beneficiarios del Ingreso Familiar de Emergencia, de los cuales 379.592 son desempleados o trabajadores informales, 178.000 son titulares de Asignación Universal por Hijo, 14.800 pertenecen al personal doméstico y 45.636 son monotributistas A y B.
En definitiva, si a esto le sumamos los 465.000 beneficiaros del bono a jubilados y pensionados, estamos analizando que en este mes y algo la Nación ha puesto en circulación en manos de santafesinos y santafesinas, más de 9.268 millones de pesos. A esto se suma también, 5.900 millones de pesos del programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción destinada a trabajadoras y trabajadores para aliviar a las pymes y al comercio en la parte salarial.
En la provincia están congelados los cuadros tarifarios de luz y de agua, para que cada uno de los vecinos y las pymes y los servicios. También hemos prorrogado los vencimientos de ingresos brutos, de los aportes al Instituto Becario, el Inmobiliario Rural, las cuotas del plan de pago de las moratorias y también dispusimos que se pueda pagar sellos y tasas de manera digital.
Decíamos del trabajo conjunto con los municipios, y a ellos también se les ha transferido el poder concomitante para la aplicación de las leyes de defensa de la competencia, de defensa del consumidor y de abastecimiento, como una manera de ser mucho más efectivos los controles de precios y el comportamiento en la venta de los insumos básicos en cada una de las localidades. Nos parece esencial el ejercicio del poder de policía claro, contundente y directo, facultando a los municipios para esa tarea.
Se desarrollaron aplicaciones móviles para realizar consultas, asistencia y, fundamentalmente, realizarse un diagnóstico preliminar. Esto es un aporte de los tantos que la administración pública ha tenido que hacer y va a tener que hacer en base a los cambios que la instancia de la pandemia impone con el uso de las herramientas digitales. Una de ellas es trasladar la agenda cultura a las redes y a las plataformas, de manera de continuar con la participación de artistas, de músicos, de actores, de actrices, que realizan shows desde sus casas.
Una de las prioridades de nuestra gestión es que los chicos y las chicas puedan estudiar, que no quede ningún santafesino, santafesina, sin estar en clase. Ese fue el planteo inicial. Hoy, con esta realidad, se elaboraron 751.000 cuadernillos provinciales para cada alumno, desde el nivel inicial hasta el secundario, para poder acceder al contenido pedagógico. A esto hay que sumarle 500.000 ejemplares enviados por el Ministerio de Educación de la Nación con foco en las poblaciones más vulnerables.
Se desarrollaron 4 bloques en el campus educativo para el trabajo de los docentes en cada nivel, donde los mismos acceden al material y a las circulares pedagógicas que orientan la tarea. Se planifican y se desarrollan teleconferencias con directores regionales, coordinadores pedagógicos y supervisores de todos los niveles en el marco de una cultura de trabajo coordinada.
Es una de las cosas que hay que aprovechar plenamente, hacía muchísimo tiempo que no había este tiempo para poder hablar, supervisores, coordinadores pedagógicos, supervisores y autoridades del Ministerio, ojalá de allí tengamos los mejores resultados en la posibilidad concreta del vínculo con los chicos. Por eso, expresar el enorme a la creatividad de cada uno de los educadores para llegar a cada casa, a cada niño, cada niña, a cada adolescente. El empeño que están realizando también todos los estudiantes para hacerlo en un contexto totalmente diferente y al que no estaban acostumbrados. Maestros que repartían en cada una de las tranqueras de un campo, maestros que utilizan la radio, distintas alternativas nuestras docentes utilizaron para llegar de la manera más directa y no perder el vínculo.
Tenemos otro enorme desafío, que es el de la población más vulnerable y frente al virus nuestros adultos mayores, sobre todo aquellos que se encuentran en residencias y geriátricos, donde los riesgos de contacto masivo son altos. En nuestra provincia viven 548.349 personas mayores de 65 años, de las cuales 10.195 viven en alguno de los 314 geriátricos y residencias. Allí se desarrollaron los protocolos de cuidado y prevención para los centros sociosanitarios, geriátricos y los hogares.
Coordinar con cada uno de los programas locales y voluntariados que han armado nuestros municipios es una de las partes centrales. Hay que destacar los enormes esfuerzos que muchísimas ciudades hicieron en sus programas propios de voluntariado y de ayuda, a cada uno de los adultos mayores.
El aislamiento social, preventivo y obligatorio puede producir el aumento de factores de riesgo por motivo de género. Según las estadísticas, el 97% de los casos de violencia hacia mujeres se dan en el ámbito doméstico. Por eso, desde el comienzo, cuando exceptuamos del cumplimiento del aislamiento a las mujeres que se dirigían a hacer denuncias o a solicitar ayuda, porque sabemos que el aislamiento puede producir un aumento de los factores de riesgo que inciden en la violencia por motivos de género.
Reforzamos, además, para quienes se encuentran atravesando situaciones de violencia los espacios de información, contención y asesoramiento. La línea 144, las líneas de whatsapp y también se habilitó la posibilidad de realizar denuncias y solicitar los pedidos a distancia online.
Las actividades económicas de la provincia son esenciales para los santafesinos y el país. Somos un proveedor estratégico de alimentos. Y desde el inicio de la cuarentena tuvimos que asegurar el abastecimiento y permitir que nuestra producción se exporte. Por un lado generamos los mecanismos que nos permitan sumar nuevas actividades económicas que activen el trabajo y al mismo tiempo garantizar la circulación de la menor cantidad de gente. Para ello se establecieron los corredores seguros para la actividad agroexportadora con protocolo sanitario para los puntos de carga y acondicionamiento de granos, paradores en rutas, lugares de acopio, puertos. Seis puestos relevantes de control para cosecha gruesa, 65 puestos de control de puestos sanitarios distribuidos en al territorio, y al día de hoy la cosecha de trigo y cebada se encuentra al ciento por ciento. Se ha avanzado ya con el 65% de la de algodón, el 93% de arroz, el 100% de girasol 76% de maíz, 71% de soja, y el 48% de sorgo. Más de 497.000 camiones descargaron su producción en los puertos de la provincia.
Implementamos un programa de financiamiento destinados a las MiPymes para el pago de la nómina salarial, descontar cheques, recomposición de stock, de materia, compra y adquisición de bienes tecnológicos. Esta línea se hizo a través del Nuevo Banco Santa Fe a una tasa del 24%. Al día de hoy se han otorgado créditos por un total de 700 millones de pesos.
Junto a la estrategia definida por el presidente y los gobernadores se fueron habilitando nuevas actividades económicas priorizando siempre el análisis de la salud en cada una de esas autorizaciones. Para ello se desarrollaron protocolos de salud, seguridad, e higiene para 74 rubros a la fecha excepcionados. Esto se indica la distancia que se debe guardar entre trabajadores, los elementos de limpieza a atener, los resguardos para desarrollar las tareas, la capacitación para los cuidados a tener y fundamentalmente en el ingreso de cada uno de los trabajadores, el control de la fiebre. En definitiva, dos declaraciones juradas: la del emperador que se compromete a hacer las adecuaciones para funcionar; y la del trabajador que no ha tenido fiebre en los días previos, o ninguno de sus familiares so cohabitantes ha tenido fiebre.
Estas circunstancias llevan hoy a que hay más de 13.000 protocolos presentados donde se declara que 200.344 trabajadores van a estar en funciones.
El 20% de las empresas que pretensaron protocolos no tienen trabajadores, son empresas unipersonales. El 51% tiene menos de 10 empleados. El 20% entre 11 y 50 empleados, y solo el 8% tiene más de 51 empleados. Y aquí también habilitamos a municipios y comunas para poder fiscalizar en conjunto a la provincia y el Ministerio de Trabajo en particular.
Queremos ser claros en que es una declaración jurada, confiamos en el empleador en que ha adecuado su infraestructura para poder funcionar, damos las condiciones la excepción para que puedan volver a la actividad cumpliendo sus protocolos. Nadie vuelve a trabajar como lo hacía antes sin haber adecuado sus instalaciones para producir. Pero también lo hacemos en resguardo del trabajador y de la planta. De qué nos sirve apurar a poner en funcionamiento una planta sin tomar los recaudos. Eso llevaría al cierre inmediato de la misma.
Para algunos fuimos duros, pero como se vinieron dando los números de cuanta gente tenemos movilizada en la provincia, si ya se completó gran pare de la cosecha y se hizo acopio de la misma, cuanta gente se movilizó en la provincia. Y el cumplimiento adecuado de los protocolos en cada una de estas instancias es lo que no nos ha disparado ninguna instancia de contagio. Esto lo queremos remarcar porque por eso somos exigentes con los protocolos y por eso hemos llegado a decir que si alguien funciona sin protocolo y sin autorización, vamos a cortarle la luz. Por respeto a todos los otros que lo han hecho, y lo han hecho de una manera ejemplar en la provincia, resguardando y funcionamiento como establecimiento pero fundamentalmente resguardando la salud de cada uno de los trabajadores.
Estamos comprometidos en abrazar una lógica de la responsabilidad. El pleno dominio y conciencia sobre nuestro presente que nos permita construir futuro, que es esperanza en lo que viene, es esfuerzo transformado en sueños, es compromiso con el otro. Futuro que también es incertidumbre, es ansiedad, es novedad y adaptación. Y es en ese futuro donde depositamos nuestros sueños y donde nuestros hijos depositan los suyos.
La pandemia no nos iguala a todos, acrecienta desigualdades. Potencia las carencias sobre los privilegios. Por eso evidencia una sociedad injusta y desequilibrada. En esa desigualdad, los esfuerzos de los estados siempre tienen que tener una mirada de protección sobre aquellos que más lo necesitan y eso hicimos. Los números de salud en cuanto a la articulación público privada, provincial y municipal, están orientados a que ninguna santafesina o santafesino se quede sin su cama de aislamiento y de necesitar se quede sin su cama crítica.
Por eso la construcción de los sueños del futuro requiere un claro anclaje de conciencia y dominio sobre nuestro presente. El siglo XIX estuvo signado por la Revolución Industrial, y el siglo XXI es sin dudas el de la revolución del humanismo. El presente requiere apostar al capital humano para construir un futuro vivible. Debemos movernos del esquema de la sociedad del consumo, debemos pasar de un presente descartable a un futuro sustentable. De conciencia colectiva pero con fuere compromiso individual. Esta época signada por la postergación del abrazo no será para siempre.
Estoy seguro que vamos a salir mejores. Nos dejará con la fuerza para conducir la reocupación económica donde como Estado allí estaremos, y con la experiencia para anticipar lo que viene. Todo eso es imposible de cumplir sin un Estado presente, fuerte y consiente. Fuerte para dirigir la seguridad, educación, justicia de nuestros ciudadanos; consiente para comprar los cambios tecnológicos que vienen con la automatización, con la inteligencia artificial, y sin descuidar el capital de nuestros hombres y mujeres que hoy caminan en esos cambios.
as crisis nos permiten empezar a mirar las cosas con un tamiz diferente. La pandemia puso sobre la mesa cuestiones que al menos desde la política y como sociedad aun no resolvimos. No obstante, el déficit marca una agenda de trabajo futura, y una de ellas es la conectividad. La conectividad es el déficit más alarmante que tenemos para revertir en el corto plazo.
Actualmente el 30,5% de los hogares santafesinos no tienen conexión a Internet y solo el 18,9% tiene una buena conexión. Lo que es aún más preocupante es que solo el 28%, 793 escuelas públicas, tiene conexión a Internet para uso pedagógico. Esta es una Internet que permita ver videos, tener a varios actores interactuando. Esto significa que más de la mitad de los alumnos santafesinos (383.954) no accedan a herramientas digitales en el aula.
Esta realidad nos duele y es insostenible en el siglo XXI. No podemos permitir que nuestras chicas y chicos suspendan su aprendizaje. El futuro será conectado, pero solo 205.000 hogares santafesinos de casi 1.100.000 de la provincia tienen Internet de buena calidad. 334.000 no tienes acceso a Internet fija. Todo lo que imaginamos: el teletrabajo, la venta de canales digitales, modernizar el Estado con trámites digitales a distancia, video seguridad, telefonía celular, medidores de energía eléctricos, simplificaciones de trámites, seguimiento de indicadores de gestión de municipios y comunas, educación a distancia, es inviable sin conectividad de calidad.
La conectividad es un derecho básico. Por eso no vamos a descansar hasta asegurarnos que todos los santafesinos puedan acceder a conexión de calidad y accesible. Vamos a impulsar un proyecto de ampliación de la cobertura de la banda ancha de calidad para nuestra provincia. Convocaremos a las universidades, a las empresas de servicios, a las analistas de tecnologías, a los emprendedores, entre todos estos actores para conformar un consejo para la mejora de la conectividad.
Es una etapa de colaboración. Santa Fe necesita la colaboración de todos para en el menor tiempo posible darle a los santafesinos una conectividad de calidad. Necesitamos que nos aporten ideas de cómo conectar a la provincia en el menor tiempo posible.
Las decisiones que tomemos ahora serán determinantes para nuestro futuro. Le mundo digital es una necesidad. Quien no esté en el circuito virtual corre claramente el peligro de quedar fuera del juego. De la misma forma que las compañías no pueden usar un mapa viejo para descubrir un mundo nuevo, el Estado tampoco.
Este partido no lo puede jugar ningún sector solo, ni el público ni el privado. El desafío es tan enorme que no admite un milímetro de grieta. Necesito que sean parte todos de estas decisiones como una prioridad para todos los santafesinos. La falta de conectividad repercute en una fuerte desigualdad y exclusión entre las diferentes oportunidades de acceso al conocimiento. De la misma forma vimos que chicas y chicos suspendieron su aprendizaje, lo mismo ocurrió con aquellos que pusieron en pausa su tarea porque su trabajo requiere presencia y contacto físico. En estos momentos muchas actividades económicas están literalmente paradas. El teletrabajo y las redes virtuales permiten que los servicios basados en el conocimiento se sigan prestando con normalidad. Por eso decía que la pandemia no iguala.
Dijimos que queríamos que Santa Fe el centro de la economía del conocimiento, y la economía del conocimiento es uno de los sectores con capacidad inmediata para reactivar nuestra economía. Son la forma más directa de transformar el talento de los santafesinos en más empleo, de mejorar calidad, de más exportaciones, de más ingresos. Necesitamos sumar nuevos jugadores, nuevas tecnologías, que nos permitan reconfigurar nuestra matriz productiva y nuestras fuentes de ingresos.
Invertir en ciencia y tecnología es fundamental para aumentar la productividad de todos los sectores. Si queremos participar en la economía del conocimiento necesitamos capacidad científica, inversiones, audacia empresarial, compromiso. Esto nos va a permitir generar un horizonte de posibilidades para miles de ex estudiantes y profesionales santafesinos que aun ni imaginan todas las posibilidades de convertirse en empleadores y vender su talento al mundo. Vamos a impulsar la creación de empresas de base científica tecnológica y generar un contexto adecuado para atraer y radicar esas empresas.
Vamos a crear un consejo provincial de promoción de economía del conocimiento para que entre todos analicemos la mejor manera de consolidar a Santa Fe como ese centro de desarrollo científico tecnológico y de negocios en la economía del conocimiento.
En estos espacios de decisión es fundamental también incorporar hoy a quienes en el futuro estén al frente. Vamos a crear un consejo joven para que trabajen desde ahora en los desafíos futuros de la provincia, del cambio climático, de la salud, de la industria cuatro cero, de la inclusión digital, de la integración regional, en la alianza entre el sector público y privado para consolidar una política pública que transforme el talento de los santafesino en más y mejor empleo.
Con conectividad, con energía y servicios basados en conocimientos vamos a sentar las bases de Santa Fe en el siglo XXI. Conectividad, tener la posibilidad de ser el centro de la economía del conocimiento, y con el impulso tradicional de nuestro sector agroalimentario, Santa Fe tiene allí claramente la posibilidad de un desarrollo inmediato futuro.
En cómo incorporamos más y mejores alimentos, como pudimos ver que esas cadenas funcionan a pesar del parate, cómo a partir de allí podemos incorporar todos los días mayor valor agregado. Vamos a impulsar la formación de alumnos en ciencias, tecnologías, ingenierías, matemáticas, en todos los niveles educativos, y un programa de capacitación en nuevas tecnologías. En definitiva, todos tenemos que seguir aprendiendo.
Tenemos el desafío de que catorce mil 407 alumnos que abandonaron el sistema lectivo en 2019 lo podamos recuperar, tenemos el desafío de que quien arrancó el jardín comience el primario, todos tienen que estar en la sala de 4. Para eso hemos universalizado la sala de 4, no la pudimos comenzar a disfrutar pero allí están los cargos creados para que nadie se quede sin anotar a sus hijos en la sala de 4 años y también para garantizar que todos los que terminen la escuela primaria estén sentados en su banco de la escuela secundaria.
Hemos creado todos los cargos de maestro inicial en todo el territorio provincial para que los chicos puedan asistir a la sala de 4 y se crearon 90 cargos nuevos para docentes integrados para fortalecer la integración de los menores y jóvenes con discapacidad.
Vamos a crear “Santa fe Banco”, entidad que basará su desempeño en la gestión digital en la tecnología de vanguardia y bajo costo. Tendrá como objetivo financiar empresas existentes o a crearse, priorizando aquellas que basen su producción en nuevos patrones tecnológicos e imperativos en el mundo, promoviendo su inserción internacional y potenciando su capacidad exportadora provincial. Pero también incluyendo a empresas y familias que hoy no pueden acceder al crédito. Hablar de inclusión financiera hoy es decir acceso al crédito para todos.
Necesitamos crear una plataforma digital que abarque desde la última tecnología, inteligencia artificial, base de datos. Procuramos priorizar la inclusión financiera y la digital de todos los sectores. La crisis sanitaria y eocénica generada por el Covid no solo puso en riesgo la salud de las personas sino también la supervivencia de una cantidad de empresas que se vieron obligadas a parar drásticamente su actividad productiva y comercial. En economías como la argentina los niveles de informalidad reducir el uso de efectivo para evitar el contacto y la circulación innecesaria de sus habitantes y asistir financieramente a las micro y pequeñas empresas en forma segura, urgente, representan desafíos gigantescos. Las tecnologías digitales pueden contribuir a estos retos.
La banca digital permitirá atender a los segmentos que tradicionalmente no acceden a los productos y servicios de la banca tradicional. Respaldaremos el otorgamiento de créditos con el funcionamiento del sistema de garantías provinciales. Para ello este nuevo instrumento se completará con otro de vital importancia para facilitar el crédito y mejorar el financiamiento a las pymes santafesinas. Nos estamos refiriendo a la creación de Santa Fe Garantiza, sociedad de garantía recíproca que será creada en el marco de la ley 12.733 aprobada por esta legislatura hace 12 años, en el 2007.
Adicionalmente se pondrá en marcha “Santa Fe Subsidia Tasa” un programa de subsidios de tasa de interés para todas las pymes de la provincia con el objeto de reducir aún más el costo de financiamiento de los sectores productivos que así lo requieran en el marco de esta instancia que estamos viviendo.
Y también tendremos el “Santa Fe Desarrollo Regional”, con fuerte impulso a las agencias y asociaciones para el desarrollo. Allí aportaremos para la utilización de cada uno de ellos en asistencia financiera a aquellos sectores que no tienen acceso al crédito formal, $125 millones para esta red, para que más de 120 instituciones de extensa cobertura territorial y con estrecha relación de las mi pymes del sector industrial y de servicios, puedan desplegar sus actividades.
En nuestra tarea de poner de pie a Santa Fe, la seguridad ciudadana es un pilar fundamental y por eso desde el inicio de nuestra gestión iniciamos una etapa de profundos cambios para prevenir y reprimir el delito. En esta tarea no estamos solos. El respaldo que estamos recibiendo del gobierno nacional demuestra el compromiso que tiene el presidente de la Nación con los santafesinos para enfrentar de manera articulada esta problemática que hace muchos años está instalada en la provincia. La cooperación entre las fuerzas de la provincia con las fuerzas federales, junto al reordenamiento judicial con un profundo sentido federal para la lucha organizada contra el crimen organizado impulsado desde la Nación, sin dudas, tendrá su impacto en nuestra lucha contra el narcotráfico.
La modernización del sistema de seguridad pública de Santa Fe es un imperativo de primer orden. Necesitamos nuevas bases para hacer más eficiente el sistema policial y mejorar su cercanía con la ciudadanía. Por ello tenemos en agenda legislativa tres proyectos: el proyecto de Ley de Seguridad Pública, para establecer las bases jurídicas e institucionales del sistema de seguridad publica provincial con eje en la conducción política del sistema policial. El proyecto de Ley de Sistema Policial que promueve la adecuación a un modelo de policía moderna, profesional, democrática y con perspectiva de género. Y el proyecto de Ley de Control del Sistema Policial para optimizar las capacidades institucionales referidas a la investigación y la sanción de faltas disciplinarias y la investigación de las actividades ilegales que pudiera incurrir el personal policial.
Estos tres proyectos serán debatidos en todos los ámbitos sociales de la provincia de Santa Fe, a través de foros a los que serán invitados las universidades, las entidades intermedias, los colegios profesionales, las asociaciones sindicales y de empresarios, los y las policías de todas las especialidades y jerarquías así como todos los ciudadanos y ciudadanas que deseen participar. Por su parte, esta reestructuración también apunta a asegurar el propio bienestar policial, no solo mediante la dotación de mayor formación y mejor equipamiento, sino también con medidas que nos permitan cuidar a quienes nos cuidan.
También vamos a hacer de esta crisis sanitaria una oportunidad en materia de provisión de servicios públicos, en particular en el servicio de electricidad. Hemos iniciado un camino hacia una EPE digital, avanzaremos rápida y profundamente en los próximos meses. Una de las líneas principales de acción será cubrir un millón trescientos sesenta y cinco mil usuarios de la Empresa Provincial de la Energía con un moderno sistema de provisión. Ello nos permitirá lograr tres resultados fundamentales para tener una empresa mucho más eficiente, precisa y en tiempo real para las decisiones. Bajar sensiblemente los costos de la empresa y un mayor control de fraude eléctrico.
Complementariamente, seguiremos avanzando en el proceso de transformación de la oficina virtual nuevas formas de pago, de acceso a la información y de atención al cliente para que el usuario residual tenga a la EPE mucho más cercana en todo el territorio provincial.
Quiero finalizar destacando el rol del Estado. Se ha creado un nuevo consenso respecto al rol irremplazable del Estado en el cuidado del presente y del futuro de nuestra gente. Creemos en un Estado que cuide y que ordene las prioridades. Nación, provincia y municipios compartimos una causa común: más allá de nuestras identidades políticas. Quiero agradecer a todas las fueras políticas de la provincia por anteponer la vida de nuestro pueblo sobre cualquier interés particular. Agradezco particularmente a cada santafesina, a cada santafesino que siguieron y siguen las recomendaciones de nuestros médicos y de nuestros especialistas. No es posible adivinar lo que todavía no sucedió pero si es posible prepararse y tener capacidad de reacción. El achatamiento en la curva de contagio demuestra que la responsabilidad de los santafesinos se propaga más rápido que el virus. El error sería subestimar la crisis y creer que lo más grave ya sucedió. Gracias al esfuerzo entre Nación, provincia y municipios, y a la sociedad que respetó las indicaciones, estamos más y mejor preparados que el primer día.
La situación de los hospitales públicos de la provincia era grave antes de la pandemia. Cuando les contaba de los inviernos donde se superaba la capacidad de las unidades de terapias intensivas, estamos un poco mejor. Con los arreglos y con la llegada de los respiradores iremos mejorando día a día esa falencia. Los tiempos son desconocidos, nuestros valores los mismos de siempre.
Seguiremos priorizando el cuidado de los humildes, de los jubilados, y de los que más necesitan de la solidaridad del Estado para salir adelante. Como lo ha dicho el presidente, es falsa la antinomia entre salud y la economía, la vida siempre está primero pero la economía no puede ser dejada de lado y Santa Fe así lo demuestra.
La pandemia demostró que la conectividad a internet es tan importante como las oras viales, la logística del transporte. Ojalá la podamos poner a la misma altura de lo que significa para nosotros hoy la hidrobia, el avance del desarrollo ferroviario llegando a nuestros puertos como una manera de mejorar la logística de forma permanente.
No podemos seguir limitando el talento cultural, científico y tecnológico de los santafesinos con los niveles de conectividad del siglo pasado.
Vamos a trabajar con los docentes codo a codo para recuperar el tiempo perdido. La pandemia nos da una nueva oportunidad de asumir una nueva conciencia ambiental, los recursos naturales y el desarrollo sustentable. Vamos a acompañar la innovación de nuestros complejos de producción para incorporar criterios sustentables.
No me olvido que el pueblo de Santa Fe me eligió para luchar contra el narcotráfico y el crimen organizado. Mi compromiso de defensa de la vida es el mismo que el primer día. La tarea de las fuerzas de seguridad durante la cuarentena les valió la confianza renovada de nuestro pueblo, que este respaldo social sirva para volcar todo su compromiso y vocación de servicio al combate contra la violencia y la inseguridad.
Queremos volver a tener una provincia en la que funcionen los lazos sociales, en la que todos podamos vivir seguros y en paz.
Vamos a tener con los más humildes un programa de paz y dignidad. Un programa que tiene que ver con fuerte inversión de agua potable, cloacas, viviendas populares. No más ranchos en Santa Fe. Allí vamos a estar generando ocupación, coordinando los esfuerzos de convenios recientemente firmados del PROMEBA en el área que preside María Eugenia Bielsa, en agua y cloacas con el ministro Katopodis asignando recursos importantes para volcar a cada uno de esos barrios populares.
La pandemia nos obligó a cambiar nuestros tiempos y la forma de nuestros lazos. Suspendimos los encuentros con amigos, los asados, los mates compartidos, los chicos se hicieron parte del trabajo de los padres, la familia entera volvió a las aulas desde su casa. Lo que era de cada uno ahora pasó a ser parte del espacio y la cotidianeidad familiar. La mesa del comedor pasó a estar en el centro de la escena. Hoy le compramos al almacén de la esquina y le ofrecemos ayuda a los vecinos mayores. Cada día hacemos las cosas con mucho esfuerzo, lo mejor que podemos. Pero mientras atravesamos las dificultades diarias también estamos empezando a mirar al de al lado, y a darnos cuenta que como dijo el Papa Francisco: “Nadie se salva solo”.
Esta pandemia nos ha mostrado que todos somos necesarios, que lo que hagamos nosotros mismos y lo que hagan los otros nos afecta pero que también tenemos la oportunidad de protegernos y cuidarnos mutuamente si actuamos solidariamente y vamos de la mano.
Frente a un mundo incierto, esta pandemia nos reclama que en lugar de agachar la cabeza y conformarnos, nos encontremos de otra forma y volvamos a mirarnos a los ojos.
Es una nueva oportunidad para empezar un camino distinto. Los invito a transitarlo juntos y a que no desaprovechemos esta oportunidad”.
