Este fin de semana volvieron a ingresar al edificio de la Escuela Nº 1199 provincia de Santa Fe, de Frontera, y tras causar importantes daños, el o los autores sustrajeron dos electrobombas por lo que la actividad escolar estuvo suspendida durante la mañana de ayer por falta de agua y electricidad.

El ingreso al edificio ubicado en calle 60 al 500 se habría producido por la tapia. Uno de los directivos de la institución educativa contó a LA VOZ DE SAN JUSTO lo ocurrido: "Esta mañana (por ayer) cuando el portero ingresa a la escuela, se encuentra con que estaban rotas las puertas que habían sido reforzadas con candados y rejas, en el lugar se encuentra las electrobombas que abastecen de agua al edificio escolar, rompieron la cañería y arrancaron los cables para poder sustraerlas".

Además de las electrobombas, los malvivientes se apoderaron de una buena cantidad de elementos de limpieza que se guardaban en una habitación contigua adonde se encuentran las dos bombas de aguas.

Una docente, por su parte, confirmó que en 45 días es el décimo robo que sufre la escuela. "Todas las veces han entrado por el patio, ingresado a las aulas, la cocina, el comedor y cuanta dependencia hay en el edificio. Nos han sustraído las garrafas y otros elementos".

"Ya no sabemos más dónde colocar candados"

 La docente se quejó amargamente de que no hay forma de detener el accionar de los delincuentes. "No encontramos la manera de evitar los ingresos, ya no sabemos más dónde colocar candados y cadenas, nada los detiene ya que rompen los elementos de seguridad para poder entrar, una vez adentro, rompen y se llevan lo que encuentran a mano".

Los directivos de la escuela creen que el ingreso se produce por el tapial, "los portones no han sido forzados, creemos que ingresan por el tapial, una vez dentro del patio se mueven con toda normalidad y utilizan distintos elementos para cortar las puertas y romper los candados, en esta ocasión ingresaron por una ventanita que es diez por diez centímetros".

Piden custodia policial

"Nos sentimos totalmente vulnerables, a las rejas las levantan, las rompen todo el equipo directivo, docentes y asistentes escolares nos sentimos totalmente desprotegidos, cuando llega la noche estamos esperando encontrarnos al día siguiente con un nuevo robo", indicó.

En esta ocasión, los malvivientes se apoderaron de dos electrobombas cuyo valor oscila en los 5 mil pesos cada una. "ya nos pusimos en contacto con las autoridades municipales, vino gente de Obras Públicas para ver los daños y nos dijeron que adquiriésemos las bombas y que el costo iba a ser absorbido por el municipio en caso de que el seguro no cubriera el robo".

Los directivos radicaron la denuncia ante las autoridades policiales a quienes les solicitaron mayor seguridad para el edificio escolar. "Queremos ver si podemos contar con custodia para evitar que sigan ocurriendo hechos de esta naturaleza".