Este miércoles, la Policía de Investigaciones informó sobre la recuperación de tres teléfonos celulares que habían sido robados hace meses atrás. Tras las pesquisas correspondientes, pudieron ubicar a los dispositivos.
El 25 de octubre de 2023 una persona sufrió el arrebato de su teléfono celular en la vía pública. Gracias a diligencias investigativas, el dispositivo fue localizado en una vivienda en la calle Washington al 1700. La policía, tras obtener la autorización necesaria, realizó una requisa domiciliaria y fue recibida por M.F.A., quien, tras ser informado del motivo de la presencia policial, mostró su teléfono celular.
Al verificar el IMEI, se confirmó que era el dispositivo robado. Quien lo tenía, afirmó haberlo comprado y presentó una conversación vía Messenger como prueba. Curiosamente, el denunciante había recuperado el teléfono previamente y se lo vendió a M.F.A. sin informar a los investigadores. El fiscal a cargo fue informado y dio directivas a seguir en el caso.
El 8 de febrero de este año una mujer denunció el robo de su celular por parte de un masculino. La policía llevó a cabo investigaciones y, mediante el reporte de una empresa telefónica, se identificó la ubicación del dispositivo en una vivienda en la calle Rubén Darío al 500. Tras consultar con el fiscal, se autorizó una requisa domiciliaria.
N.R.A., quien estaba en la vivienda, permitió la inspección y entregó voluntariamente un teléfono celular. Al corroborar el número de IMEI, se confirmó que era el dispositivo robado. El teléfono, marca Alcatel de color negro, fue secuestrado y posteriormente restituido a la víctima.
El último hecho, ocurrió el 12 de diciembre de 2023. Un ciudadano denunció la pérdida de su teléfono celular Samsung modelo A22. Tras recoger y analizar información, se identificó a A.A.R., domiciliado en el barrio 9 de Julio, como la persona que estaba utilizando el dispositivo.
El fiscal encargado del caso autorizó una requisa domiciliaria que resultó positiva, confirmándose que el número de IMEI del teléfono coincidía con el del aparato perdido. El dispositivo fue secuestrado y, por orden del fiscal, devuelto a su propietario. No se tomaron medidas procesales contra A.A.R.