Una vez más, el flagelo del robo de cables golpeó a la comunidad educativa, esta vez dejando sin servicio eléctrico al jardín municipal N°3 situado en el barrio Mons. Zazpe. Los delincuentes se llevaron la instalación externa completa, incluyendo la bajada, el medidor y el tablero eléctrico.
Este nuevo acto delictivo deja en evidencia la vulnerabilidad que enfrentan las instituciones públicas frente a la ola de robos de cables que azota la región. A pesar de los esfuerzos de las autoridades locales por prevenir estos actos, los delincuentes continúan perpetrando sus acciones sin dar tregua.