Ciertos días y horarios conseguir un remís o un taxi en Rafaela es casi misión imposible. En algunos casos, con suerte, habrá que esperar bastante hasta que un coche se desocupe. Incluso, suele verse en ocasiones colas de pasajeros en la Terminal de Òmnibus cargados con sus bolsos, aguardando algún auto que los traslade dentro de la ciudad.
Todo esto tiene una explicación, y es que a pesar de que Rafaela sigue creciendo y que retomó ya hace rato su ritmo habitual como ocurría antes de la pandemia, la oferta de autos que trabajen como remises o taxis se vio seriamente resentida. Datos oficiales a los que accedió RAFAELA NOTICIAS muestran que en marzo del 2020, es decir, previo la pandemia, se encontraban registrados en el Municipio 293 vehículos habilitados para remis. Dos años después, marzo del 2022, ese número es de 234, es decir, 59 unidades menos. Lo que significa que, a raíz de 2 remiseros por mes dejaron de prestar actividad en la ciudad en los últimos dos años.
Lo que pasa con los taxis no es diferente a lo que sucede con los remises, aunque representan un volumen de coches menor. El cupo máximo en la ciudad para este tipo de vehículos es de 32 licencias, ocupándose actualmente 20, aunque los propios taxistas aseguran que son menos los que verdaderamente están prestando el servicio. Al analizar los números del 2021, se puede ver que se dieron de baja 9 licencias de taxi entre abril y noviembre de dicho año, habiendo una sola alta en ese período.
Tanto para remiseros como para taxistas de Rafaela, con los que habló este medio, los motivos del retiro de la actividad de varios trabajadores tuvo que ver principalmente con dos cuestiones. Por un lado, las restricciones de circulación que se registraron durante la pandemia resintieron la actividad, la gente se movió menos y ante un escenario de incertidumbre y crisis económica sólo utilizó este tipo de transporte para cuestiones impostergables. El otro gran tema tuvo que ver (y sigue siendo) el costo del mantenimiento de los vehículos, que además son unidades que están circulando entre 12 y 14 horas por día como mínimo. Cualquier arreglo o recambio de repuestos no baja en la actualidad de los 30 mil pesos y ni hablar de aquellos conductores que ya tienen que ir pensando en el cambio de modelo del auto que no debe exceder los 10 años de antigüedad, si bien en este punto hubo algunas flexibilizaciones. A algunos los agarró la pandemia pagando la cuota del nuevo auto, algo que no pudieron seguir afrontando, mientras que otros se vieron involucrados en préstamos que no llegaron a pagar. Todo esto generó un combo que impactó directamente en la rentabilidad de los choferes, haciendo que muchos desistieran de seguir trabajando en este servicio de traslado de pasajeros. Tambíen, en la charla con los trabajadores surgió la problemática de la inseguridad, varios remiseros o taxistas se vieron en situaciones de riesgo. Lo que hizo que limitaran sus horarios de trabajo o los sectores a donde ingresan, lo que también empezó a generar faltante de vehículos en la calle.
Desde la Asociación de Taxistas confirmaron que desde abril aumentó la tarifa de este servicio, que pasó de 80 a 120 pesos la bajada de bandera y de 6 a 10 pesos la ficha de 100 metros. Con estas nuevas tarifas, comentaron, el servicio se actualizó y se equipara a lo que cobran los remises. También aseguraron que sigue siendo un problema cierta proliferación de transportes ilegales que suelen levantar pasajeros en las paradas, por lo que solicitan más controles. Sobre todo en uno de los puntos claves como es la Terminal de Ómnibus.
La movilidad en la ciudad genera inconvenientes para varios ciudadanos que dependen de este tipo de transporte para trasladarse. Entre remises y taxis hay unos 250 autos que al parecer no son suficientes para la actual demanda de la ciudad, pero a su vez, el servicio que no resulta rentable para el que lo ejerce.