En una audiencia celebrada esta mañana de forma remota en los Tribunales de Rafaela, el juez de I.P.P. Javier Bottero resolvió que Brandon Ocampo continúe en prisión preventiva. El acusado, actualmente alojado en la Alcaidía de Casilda, enfrenta cargos por nueve hechos delictivos, incluidos abuso de armas y robo calificado.
La fiscal Lorena Korakis, representante del Ministerio Público de la Acusación (MPA), solicitó la prórroga de la prisión preventiva de Ocampo sin plazos. La funcionaria argumentó que se mantienen vigentes los requisitos establecidos en el artículo 220 del Código Procesal Penal.
“Se refuerza el cumplimiento de los requisitos normativos debido a la reiteración delictiva y el desapego del imputado a las normas legales”, expresó Korakis durante la audiencia que también contó con la participación del Dr. Carlos Flores como abogado defensor.
Entre los hechos atribuidos a Ocampo, se incluyen hechos de abusos de arma y portación indebida de armas de fuego ocurridos en en septiembre y octubre de 2022; el robo de un vehículo desde la vía pública, varios hechos de hurto, resistencia a la autoridad, daño calificado y un episodio caratulado como robo calificado por el uso de arma de fuego.
Antecedentes del caso
Ocampo fue imputado inicialmente el 30 de marzo de 2024 por seis delitos, tras lo cual se dictó su prisión preventiva. En julio, el juez de segunda instancia Sergio Alvira confirmó esta medida, fijando un plazo de seis meses para la presentación de la acusación formal, cumplida por la Fiscalía el 30 de diciembre de 2024.
La audiencia preliminar para el juicio fue fijada para el 6 de marzo de 2025. La Fiscalía anticipó que solicitará una pena de seis años y seis meses de prisión efectiva.
Un patrón de conducta reiterativa
La Fiscal Korakis hoy subrayó la gravedad de los hechos y el modus operandi de Ocampo, caracterizado por una persistencia en actividades delictivas desde hace años.
“La medida de prisión preventiva es adecuada considerando la forma de actuar del imputado, quien ha demostrado un notable desapego a las normas”, concluyó Korakis.