El Fiscal Regional del Ministerio Público de la Acusación de la Circunscripción Judicial Nº 5 (cabecera Rafaela), Carlos Arietti, se refirió al rol que le corresponde la Fiscalía para clarificar a la población “cuáles son las distintas competencias de los órganos del Estado” en materia de seguridad para que la gente sepa “qué reclamar a cada uno”. Recordemos luego de la Reforma del Código Procesal Penal en la provincia, el Ministerio Público de la Acusación (conocido como Fiscalía), pasó a tener un protagonismo más importante que antes y un conocimiento de la sociedad mayor. Son varios los ciudadanos que ante cualquier inquietud se acercan hasta el local de calle Necochea al 400 de nuestra ciudad para hacer sus reclamos o denuncias. Pasó hace unas semanas con los dueños de los corralones bloqueados, quienes reclamaron la actuación de los fiscales para la liberación de los bloqueos que se dieron en dichos lugares. Y más recientemente, este miércoles, ocurrió con los vecinos del barrio Virgen del Rosario que cansados de la inseguridad decidieron ir a reclamar también a la Fiscalía, siendo recibidos por el propio Dr. Arietti. El “jefe” de los fiscales en la ciudad le aclaró a este medio que en materia de inseguridad las fuerzas policiales pueden actuar sin la orden de la Fiscalía ya que no es competencia de ésta dar este tipo de directivas debido a que se trata de “actividades netamente policiales administrativas”. “La policía no necesita para actuar en la prevención de los delitos ninguna orden del fiscal, es decir, para evitar que éstos ocurran o cuando se da una situación de inseguridad o indefensión. Tampoco necesita una orden para reprimir cuando el delito se está produciendo”, indicó Arietti. Y agregó: “Si usted se encuentra con una persona armada dentro de su casa, no va a llamar al fiscal. Porque el fiscal no tiene ninguna competencia para reprimir el delito que se está produciendo, ni está preparado para actuar. Si no que (la víctima) debe llamar al 911. En prevención y represión no interviene la Fiscalía. Es más, si un fiscal da órdenes a la policía para que prevenga o reprima delitos está, en un Estado de derecho, cometiendo un abuso de autoridad porque no tiene competencia legal para hacerlo; y un policía podría legítimamente negarse a cumplir esa orden”. Arietti aclaró que la intervención de él y sus colegas aparece luego que se comete un delito para “investigar un hecho, averiguar si constituye delito, identificar a los autores y eventualmente formular una imputación”, y no antes. De esta manera, el Ministerio Público de la Acusación deja en claro que, tanto la prevención como la represión de los delitos que generan inseguridad en la población, deben tener una resolución más desde las fuerzas policiales, y desde el poder político que las rige (en este caso el Ministerio de Seguridad del gobierno provincial) que desde la Fiscalía en sí.