Cirilo Bravo (58) está acusado de homicidio doloso doblemente agravado, por el vínculo y por haber sido cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género (femicidio); La víctima fue su esposa, Mariel Zimmerman, a quien le dio muerte la medianoche del 26 de octubre del 2022, en la vivienda que ambos compartían en Humberto Primo. De ser hallado culpable, podría recibir cadena perpetua.
El juicio debía comenzar ayer, pero la audiencia se reprogramó para este miércoles. Con Rafaela Noticias como único medio presente en la sala, el tribunal conformado por la Dra. Cristina Fortunato y los Dres. Nicolás Stegmayer y Gustavo Bumaguin, escuchó los alegatos de apertura tanto del Fiscal de Homicidios Martín Castellano como de la defensa técnica del imputado a cargo de la Dra. Georgina Alassia.
El principal contrapunto en las presentaciones de las partes fue la motivación de Bravo para darle muerte a quien hasta ese momento fue su esposa por 36 años: Para el Fiscal, se trató de un crimen “violento y despiadado” como colorario de una vida de sometimiento y maltrato; la Defensa invirtió este postulado y basa su teoría en un “acto de defensa” de Bravo por la “violencia sistemática” que ejercía Zimmmermann contra él.
Durante 6 audiencias, por la que pasarán unos 70 testigos (entre familiares, policías, médicos y peritos), ambas posturas tendrán que sostener lo que argumentaron en sus alegatos y convencer al Tribunal que, de no mediar inconvenientes, dará su veredicto sobre el final de la próxima semana.