Algunos episodios de inseguridad que se vienen registrando en las cercanías del establecimiento e incluso en la misma institución educativa hicieron que las autoridades del Instituto Superior del Profesorado Nº 2 Joaquín V. González resolvieran la colocación de rejas en los accesos al edificio ubicados sobre calle Pasteur y con frente también a Blas Olivero.
Hace algunos días desconocidos vaciaron las estanterías de la cantina -que se encuentra tercerizada, pero dentro del edificio principal- y también en otros episodios se han registrado robos de bicicletas, motos y partes de bicicletas, incluso cuando éstas tienen candados y medidas de seguridad.
Además, las propias autoridades municipales reconocen que el sector de la plazoleta Suiza es un pasaje "inseguro" y por ello han incluido a ese espacio en el plan de reformas que se llevarán adelante en el próximo semestre, para dotarlo de más iluminación y de vías de vinculación con el propio Instituto que lo hagan más funcional a los estudiantes que concurren a esa casa de estudios.
Con las rejas, además, se pretende limitar las posibilidades de que merodeadores o vándalos puedan circular libremente por áreas que pertenecen al edificio escolar pero al mismo tiempo ofrecen escondrijos y lugares de ocultamiento para quienes no tienen buenas intenciones.