La crisis económica que afronta el país impacta de modo importante en todas las actividades, incluidas las de instituciones deportivas. Lo saben los dirigentes de cada club del país, que deben decidir prioridades y establecer líneas de acción que satisfagan a los socios, mantengan la ilusión de los hinchas pero a la vez no comprometan el patrimonio institucional. Pasa en los grandes clubes del país y en los pequeños reductos de barrio. Y no todos consiguen lo que sueñan.
Lo cierto es que en el caso de Atlético de Rafaela, el fútbol femenino, que tuvo un fuerte despegue en los últimos años y en el 2023 logró un histórico ascenso a la Primera B de AFA, sufre las consecuencias de la coyuntura: el club decidió no participar del torneo 2024. Lo comunicó a través de una declaración hecha pública este martes por el Consejo Directivo, cuyo mensaje se comparte en este espacio en forma textual:
El Consejo Directivo informa a socios, simpatizantes y público en general que no están dadas las condiciones para asumir tamaño compromiso ante la difícil situación económica actual.
Sin dudas que el 2023 quedará en la historia de nuestro club por los logros obtenidos, y es por eso que hasta último momento se buscaron distintas opciones para poder cubrir el presupuesto. Sin embargo, los altos costos y la falta de interés en sponsorear la participación, llevó a que cualquier esfuerzo sea inútil.
Desde el Consejo Directivo lamentamos profundamente esta actualidad, pero dejamos bien en claro que el bienestar económico y financiero de la institución está por encima de todo.