En septiembre, las ventas en los supermercados de Santa Fe acumularon diez meses consecutivos de caídas interanuales, registrando una contracción del 31,8% durante los primeros nueve meses de 2024, según un informe del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso). Esta dinámica negativa, según el organismo, se observa tanto en el ámbito provincial como nacional.

“En septiembre, todos los sectores presentaron descensos en términos reales, reflejando una caída generalizada del consumo masivo”, destacaron desde el Ceso. Celina Calore, economista y directora de la regional Santa Fe del organismo, explicó que las ventas comenzaron a disminuir notablemente en diciembre de 2023, alcanzando en septiembre una baja interanual del 30%.

El informe se presenta en un contexto de advertencias por parte de la Cámara de Supermercadistas de Rosario (Casar), que ha señalado la urgencia de una “actualización salarial” para que la población pueda volver a adquirir productos que hoy resultan inaccesibles.

En diálogo con Punto Medio (Radio 2), Calore expresó preocupación por la falta de un punto de estabilización en la caída de ventas. Aunque la inflación ha mostrado señales de desaceleración, los ingresos no han logrado recuperarse lo suficiente para compensar las pérdidas acumuladas.

Entre los rubros más afectados en septiembre se encuentran bebidas (con y sin alcohol), productos electrónicos, indumentaria, calzado y textiles. Aunque no son considerados de primera necesidad, Calore resaltó que estos productos forman parte de la canasta básica familiar.

Por otro lado, en noviembre, el Ceso advirtió sobre un aumento del 6,3% en la inflación de la canasta básica alimentaria en los supermercados de la provincia. Además, Calore subrayó que el consumo de carne se encuentra en mínimos históricos y señaló que no se registraban niveles tan bajos en la compra de alimentos y productos esenciales desde la pandemia.