Mauricio Macri, decidió dejar de lado los feriado puente porque no veía que esos días beneficiaran económicamente para los comerciantes. Pero en la misma bolsa metió el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia. Esta medida generó un fuerte rechazo en varios sectores políticos opositores y organizaciones de Derechos Humanos. Pero los espacios aliados a Cambiemos no recibieron con los brazos abiertos el polémico decreto.

El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, cuestionó la decisión del gobierno nacional de transformar en movible al feriado del 24 de marzo, Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, por considerar que se trata de una fecha "fundacional" de defensa de la democracia y rechazo al terrorismo de Estado. 

El mandatario cordobés, anticipó al respecto que dispondrá que en la provincia ese día sea "una jornada de reflexión de la memoria, la verdad y la justicia en todas las escuelas", aunque se pronunció en contra de disponer un asueto con el argumento de una medida de este tipo sólo alcanzaría a los empleados públicos. 

Schiaretti se refirió a la medida presidencial en declaraciones a la prensa reproducidas por el portal de noticias de la gobernación cordobesa, en las que señaló que existen "cuatro feriados" que, por ser "fechas fundacionales para el país", deben ser "inamovibles": el 25 de mayo; el 9 de julio, el 20 de junio y el 24 de marzo.

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