El Departamento Ejecutivo Municipal de Rafaela liquidó los sueldos del personal correspondientes a octubre -que serán depositados este martes- con un 13% de aumento respecto a lo pagado en septiembre. Se trata del mismo incremento que aceptó la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de Santa Fe (FESTRAM), de la cual el Sindicato de Empleados y Obreros Municipales (SEOM) resolvió separarse en septiembre.
Para entender mejor: por un lado, el SEOM comenzó a negociar con una "Mesa Territorial" que integran presidentes comunales e intendentes de las localidades cuyos trabajadores están afiliados al SEOM, entre ellos los de Rafaela, Esperanza, San Vicente y 45 comunas. Desde antes de mediados de año los incrementos salariales que pagan los municipios y comunas de la región se definen en esa "Mesa Territorial", por afuera de lo que negocia la FESTRAM en paritarias reconocidas por la provincia (de hecho, en esa mesa se definen -al menos hasta ahora- los aumentos a los jubilados municipales que cobran de la Caja provincial) y con municipios y comunas de los gremios que permanecen en la FESTRAM, donde ya no están los sindicatos de Rafaela, Santa Fe y Rosario.
Sin embargo, en la última reunión de la Mesa Territorial los intendentes de la región ofrecieron 15% de aumento y el SEOM, invocando un mandato de los delegados, rechazó la propuesta, plantándose en el reclamo de un 22% -que llevaría el total de incrementos desde enero a un 102%, contra el 95% que proponen los intendentes de la región-, lo que vino acompañado de un paro de 24 horas concretado el jueves pasado y al anuncio de otro paro de 48 horas para esta semana, finalmente levantado por imposición de la Conciliación Obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo.
Frente a este panorama, los intendentes y presidentes comunales pusieron el grito en el cielo. Se dice que el SEOM "aceptaría" un compromiso que se ubique entre el 17 y el 20%, pero los jefes comunales de las localidades más pequeñas se plantaron: 15% o nada. En el medio, en muchas ciudades y pueblos hay cambio de autoridades, y eso incluye a Rafaela y Esperanza, donde las administraciones locales pasan a manos de Juntos por el Cambio después de haber sido gobernadas hasta ahora por el justicialismo.
En el caso de Rafaela, la liquidación de sueldos se hizo con el porcentaje acordado por FESTRAM, a sabiendas que luego la Mesa Territorial seguramente corrija el monto a la suba. Pero como ya adelantó este medio, cada punto de incremento significa para el municipio de Rafaela 7 millones de pesos extras. La diferencia de 7 puntos entre lo que proponen los ejecutivos y lo que reclama el gremio significaría para Rafaela nada menos que casi 50 millones de pesos extras. Esos son los números que también Luis Castellano le transmitió a Leonardo Viotti antes de que el intendente electo se tomara unos días de descanso previo a lo que será su asunción.
En el tira y afloje de los números pesan muchos factores y habrá qué ver qué final tiene la historia.