La citada sátira cinematográfica tiene enorme similitud con lo que ocurre en la Argentina desde hace mucho tiempo, más de una década. Aquí se demuestra repetitivamente que la economía del país va por un camino equivocado, pero quienes conducen los destinos económicos, ignoran los guarismos de extrema pobreza de gran parte de la población, desconocen tener la segunda moneda más devaluada en el mundo, niegan tener índices de precios que cada dos años se duplican, desconocen la creciente inseguridad, entre otras cuestiones y nos dicen no miremos, que vamos por la senda de la distribución de la riqueza en el país.
Igual que en la peli, los que niegan estas cosas y nos quieren hacer mirar para otro lado, persiguen intereses personales y poco le importa el resto de la población, ya sean estos intereses, mantener el poder, la fama o el dinero.
De esa misma manera cuando fue la batalla por la vida, donde terminó aprobándose la legalización del aborto en el país, y además financiado con el erario público, se nos decía que la vida no se produce desde la concepción, sino cuando el legislador diga. Fecha que puede ser cambiada, hoy puede ser en determinada semana de gestación y en el futuro en otra. Aunque contradiga a la ciencia, parezca ridículo o haya latidos del corazón y nos obliguen a no escucharlos (por si no lo sabían, pueden penalizar al médico que los haga escuchar), igual que en “No mires arriba”, no escuches, no vaya a ser que te des cuenta del genocidio que se está realizando.
Cuando económicamente no reconocemos el mal futuro, no solo implica pérdida de vidas, sino también la pérdida de sueños y el desperdicio de talentos y de muchas personas que no podrán progresar y desarrollar sus dones.
Nos dicen que no miremos al FMI, que no es necesario arreglar y volver al mundo financiero. Ese sector del gobierno que desea eso, lo que probablemente desee es que tengamos que ir a pedir ayuda económica a Irán o a China, de manera de convertirnos en un país similar, con una elite de gran poder y el pueblo sin libertad, no por religión como en Irán, o por la imposición de partido único (Comunista) en China, sino a porque el pueblo argentino quedará sumido en la pobreza y sin posibilidades de salir de ésta, aceptando las dádivas y beneficios que el sector gobernante les ofrezca.
Antes de que esto ocurra, Look Up, miren arriba, despertemos y exijamos el respeto de la Constitución y los valores que hicieron grande al país. Cada uno de nosotros debe mirar arriba, mirar a Dios y dejar de distraernos con pequeñas cosas de todos los días, de esas noticias malas que plagan algunos noticieros para que nos amarguemos y no miremos lo importante. Miremos arriba, ahí obtendremos la fuerza necesaria para salir adelante y actuar a tiempo.
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