Rafaelinos y rafaelinas quedaban impresionados por una acción pintoresca en el microcentro de la ciudad. Aproximadamente, entre siete y ocho mujeres trabajaron en sus casas haciendo flores de crochet, para luego plantarlas en los canteros del Bv. Santa Fe.
Ellas iniciaron bien temprano un sábado a las 08:00 horas. Si, un fin de semana. En horas de la tarde, lamentablemente, la gente que pasaba por el lugar se iba llevando al menos una flor. Duró poco.
En su cuenta de Instagram, lamentaban: "En todos los países que se realizan las intervenciones de Yarn bombing son degradadas por el tiempo… En nuestra querida ciudad en apenas unas horas “se llevaron” varios meses de trabajo impidiendo que otros rafaelinos puedan disfrutar también… Por qué no hacemos una campaña y las devuelven a su lugar??? Sería genial y hablaría de comenzar a educarnos…."
Lectores de este portal también hicieron llegar su descargo, indignados por lo acontecido. El esfuerzo desinteresado de un grupo de mujeres, que no llegó siquiera a las 24 horas de vida.
“Causa asombro el comportamiento desubicado de ciudadanos”, expresó uno de nuestros lectores. Y Se preguntó: “¿Por qué actúan de esta forma? Es una vergüenza que haya gente con este comportamiento”.
