La Universidad Nacional de Rafaela (UNRaf) brindó este martes 15 de mayo, una charla abierta y gratuita sobre el acontecimiento histórico que sentó las bases de la Universidad Pública argentina actual e inspiró cambios profundos también en Casas de Estudios de Latinoamérica y el mundo: la Reforma Universitaria de 1918. Para esto, fueron convocados el Prof. Alberto Sileoni y el Lic. Andrés Delich. La actividad se realizó en el Auditorio “Prof. Virgilio Cordero” del Instituto Superior del Profesorado N°2 “Joaquín V. Gonzalez” a las 18 horas, aunque previamente los disertantes brindaron una conferencia de prensa a los medios locales. 

Al referirse a la Reforma Universitaria, Sileoni expresó que "fue un acontecimiento cordobés- argentino, pero fundamentalmente americano. Encuentro coincidencias entre aquellos jóvenes y estos, como la irrenunciable vocación de cambiar el mundo, de pensar que las cosas pueden ser de otra manera, de no someterse a las injusticias. Aquella universidad tenía menos derechos, donde había una alarmante ausencia de mujeres. Hoy el 60 por ciento de las estudiantes universitarias argentinas son mujeres y se gradúan más mujeres que varones, lo cual es una interesante noticia. Éste no es un dato menor y es algo que ha cambiado. Me parece que aquellos jóvenes querían no sólo participar, sino también protagonizar los hechos y estar en la conducción de la universidad, y participar de los claustros de conducción. Y esto siempre es una buena noticia. Ha quedado un poco rezagada la vocación docente en las universidades, a favor de otras como las de investigación. Por supuesto que en la Argentina la única que investiga es la universidad pública, la privada lo hace poco. Debemos transmitir, tratar de que los jóvenes se interesen, de que vivan una reforma en estos días, que esa reforma se renueve, se revisite, se piense en otros desafíos que hay y que son muchos. Una universidad bien inserta en su pueblo, que no se ensimisme, que no viva la autonomía como extraterritorialidad, que la consiba como un diálogo con el gobierno, con el pueblo que la sostiene. Si bien hay - en la universidad - una buena cantidad de jóvenes que provienen de los sectores más carecientes, todavía la universidad tiene una deuda, porque esos jóvenes no llegan a la universidad del modo que quisiéramos, así que hay mucho para trabajar. Como por ejemplo hacer un sistema cohesionado y abrir los brazos a la participación política de los jóvenes. Me parece que estamos en camino. Falta, pero si miro para atrás, siempre tengo una posición optimista. En 1918 había 8 millones de habitantes en Argentina y 8 mil estudiantes universitarios: era el 0.01 de la población. Hoy hay el 4.5 de la población argentina que va a la universidad y el 3.5 va a universidades públicas, y eso es una gran noticia. Por supuesto que quisiéramos que se reciban más de los que lo hacen, pero aún así el paso por la universidad del que no se recibe, es absolutamente beneficioso y les cambia la vida". 

Por su parte Andrés Delich, aseguró que "el modelo universitario argentino en la región sigue siendo visto con enorme admiración. Es un modelo abierto, público, gratuito. No se encuentra a la vuelta de la esquina en américa Latina, por eso tenemos la cantidad de estudiantes que tenemos que vienen a nuestras casas de estudios, y bienvenido sea. En ese sentido, sigue siento - el sistema argentino- un faro de referencia en la región. Uno encuentra en América Latina, en las universidades, profesores argentinos pasantes en diferentes materias, carreras, postrados; encuentra libros producidos en la universidad argentina. Es decir, seguimos teniendo un lugar importante. Lo cual no quita que tengamos una reflexión sobre las deudas, los problemas, el futuro, cómo afrontamos mejor como sistema universitario; pero sigue siendo respetado. En el mundo hay otros modelos de incorporación que muestran otros perfiles, a los cuales nosotros tenemos que incorporar en las discusiones. Algunos tienen mayor niveles de movilidad que el que tenemos nosotros y han privilegiado eso, como el modelo europeo; otros tiene nmayor capacidad de conectividad inmediata con lo que pasa en el sistema productivo, como los americanos. Son modelos distintos que nos puede servir a nosotros para reflexionar sobre los problemas que tenemos, pero no para copiarlos. El modelo argentino es parte de un modelo integral de desarrollo del aparato estatal que es propio de nuestro país". 

Crítica al gobierno nacional por el cierre de paritarias

RAFAELA NOTICIAS consultó al exministro de Educación, Alberto Sileoni, respecto al conflicto docente que existe con el gobierno nacional actual, que ha decidido cerrar las paritarias y que las mismas se circunscriban al las provincias. "No tengo una opinión positiva respecto de cómo están encarando el formato de la educación. Me parece que el Estado Nacional ha resignado responsabilidades. Me parece que la paritaria no era un capricho, sino una ley que se desprendía con claridad de la Ley de Financiamiento y era un mandato de esa ley. El rol del Estado nacional era fijar un piso salarial, no un techo, debido a que los salarios son diferentes en las provincias. Pero sí el espíritu era que ningún docente ganara por debajo del piso establecido. La vigencia de la paritaria había elevado el salario docente en la Argentina y había hecho menor la brecha entre los que más ganaban y los que menos ganaban. Eliminar las paritarias no es sacar un derecho a las organizaciones gremiales, sino al millón cien mil docentes que espera un Estado nacional que acompañe en sus políticas a las provincias; y eso me parece que se ha perdido. No sólo con la eliminación de las paritarias, sino con la eliminación de otros planes y programas que asistían a las provincias. De hecho Santa Fe es una de las provincias que podemos considerar fuerte, y con un presupuesto sólido. Pero hay una gran cantidad de provincias, como las del norte, que tienen el 95 por ciento de su presupuesto dedicado a salarios, por lo tanto no pueden hacer otras políticas educativas. Entonces allí debiera haber un Estado Nacional más atento, que tenga una vocación de estar más cerca de esas provincias, algo que en este tiempo se ha perdido", indicó Sileoni.