Este lunes por la mañana, luego del corte de cintas protocolar para la inauguración del comedor, el espacio se llenó de chicos que recibieron su plato de comida. En un ratito muy corto almorzaron varios grupos, muchos apurados por seguir charlando, salir a jugar o volver a su casa.
Al mismo ritmo que los chicos, las porteras limpiaban las mesas y lavaban los platos para poder servirles a los cursos siguientes. Con mucha agilidad dejaban las mesas listas para los grupos que seguían ingresando al salón.
Cuando el movimiento se calmó y muchos chicos se retiraron, RAFAELA NOTICIAS dialogó con dos de las porteras de la escuela. Según contaron, reciben a 280 alumnos por día de lunes a viernes, y en poco tiempo servirán a más de 300.
El menú varía, todos los días es distinto. Fideos con salsa, albóndigas, milanesas, pizza, hamburguesas, pollo, arroz… entre muchas otras cosas. Desde las 11.30 hasta las 13 aproximadamente se sirve la comida a todos los cursos, desde jardín hasta 7mo grado.
Según contaron a este medio, la mayoría de los padres se muestran muy agradecidos por el servicio que ofrece la escuela. No se trata sólo de un beneficio para los chicos, ya que son muchas las horas de la jornada ampliada, sino que también favorece a las propias familias.
En cuanto a la relación con los pequeños, las porteras contaron que cada una tiene cercanía con muchos de ellos. Cada alumno crea una relación de afinidad con una portera en particular, en donde la confianza los lleva a contarles incluso sus problemas. “Tenemos que entrar en su mundo para poder contenerlos”, afirmó una de ellas.