La última graduación en el Instituto Superior del Profesorado dejó algunos números para analizar en relación a los jóvenes que deciden elegir la docencia como forma de desarrollar una profesión y ganarse la vida. El I.S.P.Nº 2 “Joaquín V. González” es la casa de estudios por excelencia en Rafaela y la región en lo que respecta a la formación de docentes en los niveles Inicial. Especial, Primario y Medio. Desde allí sale la “mano de obra” que educará a las nuevas generaciones ocupando los lugares que van dejando aquellos que ya cumplieron su ciclo dentro del sistema educativo o tomando las vacantes que se van generando por la creación de nuevos cargos. Repasemos algunos datos relacionados al Profesorado de Nivel Primario: en 2011 hubo 17 egresados, en 2012, 14; en 2013, 8 y en el 2014 se llegó a 9 (marcando un claro descenso). Si se toman los últimos 6 años hay que decir que el total de alumnos que terminaron la carrera docente fue de 68 (8 en 2009 y 12 en 2010), lo que da un promedio de casi 12 graduados por año, todas mujeres. Estas 12 nuevas profesionales repartidas en 29 escuelas primarias con que cuenta la ciudad, más las que se ubican en la región, termina no siendo un número ideal. Si a esto se lo coteja con la demanda de docentes existentes en las instituciones la situación es por lo menos un llamado de atención pensando en el futuro. Cada vez son más los maestros que se necesitan en las escuelas para cubrir reemplazos e interinatos y cada vez son menos los profesionales disponibles para ello. A los 3 meses de iniciado el ciclo escolar 2014 ya había instituciones con escalafones agotados y participando de las “Inscripciones Complementarias”. Aumentaron de manera considerable las maestras que realizan “doble turno” trabajando de 7 de la mañana a 17 horas con un intervalo de una hora para volver a su casa. Y que además deben realizar un trabajo extraescolar en su domicilio fuera del horario antes mencionado. Si bien es cierto que el “doble turno” se realiza por necesidad para incrementar los ingresos mensuales, en varios casos las escuelas no tienen otra opción que convocar a las docentes en turno contrario para cubrir los “baches” que se generan. Incluso en algunos casos, y tal como lo marca la normativa, es el vicedirector quien cubre a una docente que falta a su trabajo. ¿Por qué se dan estas faltas? En nuestra provincia, de acuerdo a últimos datos dados a conocer por el Ministerio de Educación, el ausentismo es del 24 por ciento, siendo las licencias cortas más solicitadas por los educadores las relacionadas a enfermedades infectocontagiosas, de la voz y las osteoarticulares. Mientras que en el caso de las enfermedades de largo tratamiento, se deben principalmente a problemas de índole psiquiátrico. Otra causa frecuente de inasistencia es la atención de familiares enfermos, sobre todo teniendo en cuenta que la docencia es una profesión predominantemente femenina y que son las madres generalmente quienes faltan al trabajo para atender a sus hijos. Del 24 por ciento de ausentismo que se da en Santa Fe, el 30 por ciento (la mayor parte), son de docentes que acusan problemas relacionados a lo psicológico como stress, ataques de pánico, depresión, etc. Cuestiones que podrían estar estrechamente vinculadas a las condiciones laborales que hoy atraviesan los educadores.
Las causas de fondo de por qué faltan docentes en las escuelas y por qué menos jóvenes llegan a elegir la docencia como modo de trabajo las deberían buscar los especialistas para tratar de revertir situaciones que sean más graves en un futuro. Y si bien el ejemplo puesto en este artículo corresponde al Nivel Primario, en otros niveles los números no parecen ser más alentadores. Graduados 2014 en el Instituto Superior del Profesorado: Educación Especial, 1; Profesorado en Ciencias de la Educación, 1; Profesorado de Historia, 2; Profesorado de Matemáticas, 4; Profesorado de Lengua, 5; Profesorado de Biología, 4; entre otros.