Un clima de tensión ha invadido las calles de Río de Janeiro mientras los hinchas de Boca Juniors se preparan para la final de la Copa Libertadores. Las tensiones se desencadenaron cuando la barra brava del Fluminense convocó a atacar a los aficionados argentinos que viajaron a la ciudad carioca.

Los incidentes ocurrieron en una playa local en la tarde del lunes, donde un grupo de torcedores locales agredió a unos 30 hinchas de Boca Juniors. Las víctimas reportaron robos de sus pertenencias y agresiones físicas. Los incidentes han aumentado el estado de alerta en la ciudad, ya que se espera una gran cantidad de hinchas de Boca Juniors en Río de Janeiro para el partido.

"Nos cagaron a palos. Me robaron el celular. Éramos 30 y vinieron con reposeras a la playa a rompernos la cabeza", relató uno de los hinchas, Pablo Moulia, quien compartió su experiencia en redes sociales.

Además de las agresiones físicas, los hinchas también denunciaron robos y expresaron su insatisfacción con la falta de intervención de la policía local para protegerlos. Algunas de las personas heridas, incluyendo mujeres, tuvieron que ser atendidas en un hospital local.

El clima de tensión y preocupación ha aumentado en Río de Janeiro a medida que se acerca la final de la Copa Libertadores. La mayoría de los hinchas de Boca Juniors no tendrán acceso al estadio, lo que plantea desafíos adicionales en términos de seguridad.

La final de la Copa Libertadores se llevará a cabo en el Estadio Maracaná, el mismo estadio donde el Fluminense juega sus partidos. A pesar de que no habrá más público de Boca Juniors, la presencia de hinchas argentinos en las afueras del estadio es motivo de preocupación en cuanto a la seguridad.

En cuanto a lo deportivo, el entrenador Jorge Almirón recibió buenas noticias con la recuperación de Nicolás Valentini, mientras que Darío Benedetto se entrena diferenciado debido a una lesión en el aductor izquierdo.

La delegación de Boca Juniors continuará su preparación en Brasil antes del partido más importante en años para el club de La Ribera, que busca su séptima Copa Libertadores. El Fluminense también tiene la mira puesta en su primera estrella en el torneo de clubes más importante de Sudamérica.

Estos incidentes han puesto en alerta a las autoridades y los hinchas, quienes esperan que las medidas de seguridad se refuercen antes de la emocionante final de la Copa Libertadores.