Los delincuentes que tomaron a una familia de rehén en la localidad bonaerense de Tortuguitas se entregaron pasadas las ocho de la noche y liberaron al padre de la familia y a la bebé, los dos últimos cautivos que quedaban en poder de los malvivientes.
Los cuatro hombres fueron trasladados a la alcaidía de José C. Paz, donde prestarán declaración indagatoria ante la jueza que se hizo presente en el lugar junto a la fiscal, Carina Carbonella.
Desde las 13, un grupo de cuatro delincuentes tomaron de rehén a un matrimonio y dos menores cuando llegaban a su casa. Según dijo uno de los delincuentes en un diálogo ante la prensa no se trataba de un robo sino que ingresaron al domicilio para "escapar de la Policía" que, argumentaron, los estaba persiguiendo.
Aparentemente, dos de los delincuentes se habían fugados de la cárcel de Moreno, uno de ellos se identificó como Marcelo Ameijeiras.
"No estamos jugando, no estamos drogados. Queremos las garantías de vivir. Quiero preservar la vida de estos chicos y la familia entera (tomados de rehenes), y de los cuatro que estamos acá", dijo a los gritos el malviviente, y agregó: "Acá salimos todos vivos. No entra ni sale nadie. Si la policía ingresa, va a haber una fuerte represalia por parte nuestra".
Sin hacer una denuncia concreta, acusó "al Servicio Penitenciario de la Federal y la Bonaerense, y al ministerio de Justicia nacional y provincial".
"Estoy demandando que fuimos carne usada por la política. Si hoy terminamos muertos acá es porque están encubriendo. Queremos declarar a la justicia un montón de cosas. A nosotros nos dejaron salir de palabra, porque se pagó dinero.Hicimos negocios para que nosotros salgamos", manifestó.
Antes, el delincuente afirmó que no se trata de un robo, sino que ingresaron a la vivienda para escapar: “La policía nos quería matar, veníamos de una persecución, nos metimos acá para preservar nuestra vida".
En su diálogo con la policía, exigieron la presencia de un juez y un fiscal y advirtieron que tienen "armas largas y granadas".
"Si ingresan acá se pudre todo papá, tenemos muchos años en el lomo. Volamos todos, no estás hablando con nenes", dijo el hombre que se identificó como Marcelo.
Más tarde, reiteró que en "la última fuga estuvo involucrado el ministro de justicia (Ricardo Casal) y el gobernador (Daniel Scioli)".
Ante esta situación, grupos especiales de la Policía Bonaerense trabajan en esta zona, a los que se sumaron los negociadores del Grupo Halcón. Los secuestradores, para negociar, piden la presencia de la fiscal y de los medios.