En un trabajo conjunto de la Secretaría de Servicios Públicos, la de Hacienda, Finanzas y Modernización y el Instituto para el Desarrollo Sustentable se trabaja en el Taller de Valorización de Residuos Informáticos que tiene como objetivo armar nuevos equipos a partir de los artefactos descartados por los vecinos. Las computadoras recuperadas se donan a instituciones sin fines de lucro.

En esta oportunidad se donaron 8 equipos a la Fundación La Paloma en la Flor, que dicta el "Taller Informática y Software Libre" que capacita gratuitamente y permite que los asistentes comprendan el funcionamiento de una computadora y el uso de los programas básicos (procesador de texto, navegador de internet, redes sociales). Las clases se dictan en la sede de la CTA (Tucumán y Sarmiento).

Al momento de la entrega se hicieron presentes el Jefe del Departamento de Informática, Marcelo Sánchez, Damián Condrac, quien está a cargo técnicamente del Taller de Valorización, Daniel Ricotti Secretario de Servicios y Espacios Públicos y María Paz Caruso, Directora del Instituto para el Desarrollo Sustentable quienes hicieron la entrega formal del equipamiento a representantes de la Fundación.

Recordemos que el tratamiento de los residuos especiales forma parte de los nuevos desafíos que se propone el municipio en el correcto tratamiento de los Residuos Sólidos Urbanos. Estos materiales no deben sacarse a la vía pública con la recolección domiciliaria o con la de patios ya que deben recibir un tratamiento especial para su recupero y segura disposición final.

El Punto Verde Móvil y Fijo (que está instalado en la Estación de Residuos Clasificados) son receptáculos de grandes dimensiones que cuentan con una serie de compartimentos en los que los vecinos pueden depositar los siguientes residuos: cables, teléfonos celulares, pilas, tubos fluorescentes y lámparas, cartuchos de tinta y tóner, cd?s y diskettes, televisores y monitores, ropa, aceites vegetales y de motor utilizados y objetos metálicos de cocina.

Otros residuos especiales, como el Aceite Vegetal Usado, reciben un tratamiento adecuado en la ciudad. Por ejemplo, los aceites vegetales usados se transforman en biodiesel en el Complejo Ambiental, la ropa se dona al costurero del barrio Virgen del Rosario. Los materiales que no se pueden recuperar son retirados por un operador habilitado en gestionar residuos peligrosos, de esta manera se procura que reciban un tratamiento adecuado y no pasen a ocupar espacio en la celda del relleno sanitario, donde pueden convertirse en fuente de contaminación.

El municipio realiza auditorías continuas para evaluar cómo avanzan los diversos sistemas de recolección y los resultados son alentadores, ya que crece a diario el número de vecinos que se suman y separan los residuos especiales.