Locales

Botones antipánico: ¿cuántos hay en la ciudad y por qué nunca funcionaron?

En el último trimestre del 2015 se instalaron en Rafaela 6 botones antipánicos por parte del gobierno nacional que, en algunos casos todavía se los puede ver en los espacios públicos. Los lugares elegidos fueron Saavedra y Bv. Santa Fe, 9 de julio y Aristóbulo del Valle, cercanías de la escuela Pizzurno, la ciclovía sur, inmediaciones del Anfiteatro y la vereda del Instituto Superior del Profesorado.
La intención con estos botones era aportar al combate hacia la inseguridad que en ese entonces ya aparecía como un tema prioritario en Rafaela, un año en el que se había llegado al triste récord de 12 homicidios dolosos, duplicando el índice nacional, cifra que con el correr de los años fue bajando. Pero volviendo a los dispositivos instalados, los mismos cuentan con botones que - según lo anunciado en 2015- iban a poder ser utilizados por los ciudadanos en diferentes situaciones como delitos, emergencias médicas, accidentes, incendios. Iban a estar conectados con la Guardia Urbana Rafaelina siendo monitoreados por una cámara para evitar las falsas alarmas, es decir, para que sean utilizados responsablemente por los ciudadanos. "Cuando aprieten esos botones, la Guardia Urbana Rafaelina derivará las alarmas al 107, al 911, a Bomberos o a quién corresponda. Se trata de una herramienta de prevención cuya utilidad dependerá de la respuesta que tengan los diferentes organismos a cargo de la seguridad", había manifestado quien en ese momento era Jefe de Gabinete Municipal Jorge Maina.

Dispositivo instalado en barrio Ilolay.

¿Qué pasó en el medio? A 8 años de su instalación, los botones siguen apareciendo como testigos de la falta de coordinación de políticas de seguridad que perduren en el tiempo y trasciendan los gobiernos de turno. Es que según pudo averiguar RAFAELA NOTICIAS, el tema no prosperó porque el 10 de diciembre del 2015 hubo un cambio de gobierno a nivel nacional decidiendo las nuevas autoridades no continuar con el proyecto. Por lo que los botones nunca se conectaron a la GUR, tampoco se instalaron las cámaras y por ende nunca funcionaron. En la actualidad los dispositivos están en desuso y se hace imposible reutilizarlos para darle algún fin, dado el deterioro que presentan. Por lo que todo terminó en un despilfarro de dinero público y sin ningún aporte valioso para la comunidad.

Rafaela Botones antipánico

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web