Gildo Insfrán, a sus 72 años, aseguró una vez más su poder electoral en la provincia nordesteña de Formosa. El líder peronista continuará siendo el gobernador hasta 2027, tras obtener su octava reelección con un amplio margen, obteniendo cerca del 70 por ciento de los votos. Con este triunfo, acumulará 32 años en el poder, un récord nacional difícil de igualar. La oposición, sin lograr una fórmula de unidad, tuvo escasas posibilidades de evitar el nuevo triunfo del oficialismo, que ha dominado cada elección desde el retorno de la democracia. En este territorio, queda abierta una herida en la oposición que tardará en sanar.
"Seguiré hasta que el pueblo lo decida. Soy un militante de una causa y me debo al pueblo", expresó Insfrán al emitir su voto en su localidad natal, Laguna Blanca, ubicada a 140 kilómetros de la capital provincial. Acompañado por vecinos y familiares que lo conocen desde hace muchos años, generó gran revuelo con su presencia, demorando su ingreso a la escuela donde votó debido a los saludos, abrazos, besos y fotos que compartió con hombres, mujeres y niños. A esa altura, nadie esperaba un triunfo tan contundente.
Pasada la medianoche, y tras suspender su presencia en un hotel lujoso donde se había preparado una celebración, Insfrán admitió en su cuenta de Twitter el nuevo éxito que coloca nuevamente a la oposición en una encrucijada: ¿cómo se puede vencer al aparato gildista? "La #Unidad nos hace invencibles y desde #Formosa trabajamos por la Argentina que queremos", escribió Insfrán en una serie de tuits. Recibió felicitaciones del presidente Alberto Fernández, de Sergio Massa y Agustín Rossi, quienes formarán parte del binomio presidencial de Unión por la Patria en las PASO, así como de varios gobernadores del Norte Grande y ministros del Gabinete nacional.
¡GRAN VICTORIA DE FORMOSA! Hemos logrado un contundente triunfo electoral este domingo, con el Frente de la Victoria ganando ampliamente en todas las localidades de la provincia. pic.twitter.com/WP2riKpyYn
— Gildo Insfrán (@insfran_gildo) June 26, 2023
Ni las declaraciones hirientes y agresivas contra los habitantes de la Ciudad de Buenos Aires, que Insfrán ha expresado durante mucho tiempo, ni su enfrentamiento con el obispo de la Diócesis de Formosa, José Conejero, ni las denuncias de asistencialismo o clientelismo en su contra, ni las presentaciones judiciales para impugnar su candidatura lograron frenar su nuevo intento de reelección.
Cuando se le consultó sobre las razones de sus sucesivos éxitos electorales, Insfrán simplemente dijo: "Pregúntenle al pueblo que está aquí". Con pocas palabras, expresó su agradecimiento al pueblo que continúa confiando en él. Desde las 21 horas, cuando comenzaron a cargarse los primeros resultados en el búnker peronista montado en un lujoso hotel sobre la avenida Gutnisky, las sonrisas no se pudieron ocultar, mientras Insfrán seguía el desarrollo del escrutinio desde la sede del Gobierno, en pleno centro de la capital provincial.
Lentamente, allegados y dirigentes cercanos a Insfrán se dirigieron al hotel Howard Johnson, donde en el lobby principal disfrutaron de un catering que incluso incluyó tacos mexicanos. Sin embargo, a pesar de que sonaban canciones a todo volumen, Insfrán no hizo acto de presencia para dirigirse a los aproximadamente 150 militantes que lo esperaban. Después de varias canciones festivas, anunciaron que todos podían retirarse a descansar, ya que el escrutinio, especialmente en la Capital, se retrasaba debido a problemas técnicos. Esto parecía ser una excusa, ya que minutos después el sistema de recuento comenzó a normalizarse.
En los centros electorales de la oposición, dominaba el desencanto debido a que esperaban un desenlace diferente. Mientras los simpatizantes del peronismo victorioso se concentraban en la esquina de Mitre y el bulevar 25 de mayo, los dirigentes del Frente Amplio Formoseño buscaban explicaciones en medio de caras cansadas y desaliento. Sentían que habían retrocedido en comparación con las elecciones legislativas de 2021, donde incluso lograron imponerse en la capital de Formosa.
Para Juntos por el Cambio, la derrota por casi 50 puntos representa un duro golpe. En los 9 departamentos de la provincia (Formosa Capital, Laishí, Pilcomayo, Pirané, Pilagás, Patiño, Bermejo, Matacos y Ramón Lista), no lograron ganar ninguna intendencia y solo pudieron sumar 4 concejales.
En las primeras horas de la madrugada, mientras se hacían cálculos sobre la suma de los diferentes sublemas y se recibían noticias desalentadoras provenientes de Córdoba, presumiendo la derrota de Luis Juez, los dirigentes opositores analizaban las razones del resultado adverso y repartían culpas y responsabilidades.
Algunos atribuyeron la debacle en las urnas al despliegue del aparato partidario, ese mecanismo de recursos económicos y materiales que el peronismo formoseño tiene bien estructurado. Otros mencionaron artilugios como la distribución de documentos de identidad en los últimos meses en pueblos pequeños de la provincia para facilitar el voto oficialista. También se mencionaron casos de personas que llegaron desde Paraguay con documentos argentinos para votar, así como el envío de autobuses con personas desde la Capital a diversos puntos del interior provincial. Coincidieron en la necesidad de una autocrítica profunda que evite nuevas frustraciones.
"Prepararon su propio funeral debido a su falta de ceder en su egocentrismo. Aquí hubo un cúmulo de vanidades", resumió uno de los miembros de la principal alianza opositora.
La disputa entre la Concertación Frente Amplio Formoseño (que incluye a cinco fuerzas políticas alineadas con la UCR y el PRO) y el nuevo partido creado por el empresario Francisco Paoltroni terminó debilitando a una oposición que se había fortalecido durante la pandemia de coronavirus al resistir la mayoría de las duras restricciones impuestas por Insfrán. La falta de acuerdo llevó nuevamente a la oposición a quedar atrapada en su propio laberinto.
Los conflictos internos y la aparición de un candidato extrapartidario minaron ese crecimiento que, en las elecciones legislativas de 2021, los posicionó como una alternativa, incluso ganando en la Capital con más del 52% de los votos. Paoltroni, quien invirtió muchos recursos económicos y recorrió el interior profundo "para sacar a la gente del barro", exigía el cargo ejecutivo principal con el objetivo de destronar a Insfrán. Sin embargo, en el Frente que responde principalmente al armado nacional de Horacio Rodríguez Larreta en Juntos por el Cambio, la propuesta fue rechazada casi de inmediato.
El pueblo formoseño se está expresando en paz, con la madurez y la responsabilidad que lo hace cada vez que es convocado a elegir su futuro. Con mucha fe, esperanza y alegría sigamos concurriendo a las escuelas a emitir nuestro voto.#TodosUnidos #Formosa pic.twitter.com/GbhDASm32K
— Gildo Insfrán (@insfran_gildo) June 25, 2023
"No podíamos aceptar que alguien aparezca de la noche a la mañana con esas exigencias de 'esto o nada'", explicó uno de los referentes de esa alianza. Por otro lado, sostienen que "la gente apuesta por lo nuevo y los partidos tradicionales fracasaron en los últimos 40 años en brindar soluciones a la gente". Por lo tanto, se mantuvieron firmes, lo que resultó en frustración y un voto fragmentado que benefició a Insfrán.
Esta vez, no se pudo o no se quiso repetir la exitosa experiencia de Claudio Poggi en San Luis, con una alianza multisectorial que puso fin al reinado de los Rodríguez Saá. Ahora, de cara a las elecciones nacionales, será necesario evaluar si estas diferencias se pueden resolver. Parece muy difícil.
En octubre, Formosa debe renovar a sus tres senadores nacionales. Gabriela Neme, quien obtuvo la mayor cantidad de votos en su intento de convertirse en intendenta de la capital entre la oposición, y Carbajal están anotados con Rodríguez Larreta para competir por diputados y senadores, respectivamente. Por otro lado, Ricardo Buryaile y el actual senador Luis Naidenoff, alineados con Patricia Bullrich, también están presentes. El escenario se presenta abierto después de una amplia derrota.