Con una seguidilla de casos de inseguridad rural en la región, que incluyeron en los últimos días a un animal carneado en Presidente Roca del que sólo dejaron el cuero colgado en uno de los carteles de la Ruta 70, se suman delitos en Rafaela, ya sin control.

Claramente empujados los delincuentes por el absoluto deterioro económico desatado por el aislamiento obligatorio generado por la pandemia, pareciera que ya no hay límites para seguir rompiendo la ley y mucho menos, castigos en consecuencia.
Sobre el límite este de la ciudad, en el desvío del tránsito pesado la Cabaña Armando sufrió tres hechos durante esta semana que preocupan, no sólo por la pérdida de animales, sino por la indefensión que manifiestan a pesar de los pedidos ante las fuerzas de seguridad y las denuncias correspondientes.
Tramitado ante la Comisaría Primera de nuestra ciudad, se detalló que el pasado sábado robaron de la guachera, donde están los animales recién nacidos, a un ternero que fue faenado en la extensión de la avenida Brasil, calle lindante del predio.
En la mañana del jueves, durante el conteo de animales se detectó la faltante de una ternera de un mes a la que se la habrían llevado viva, por no haber rastros del animal en el predio.
Esta mañana se hallaron rastros de sangre e incluso la caravana de un ternero macho de 14 días.
Adolfo Williner, uno de los responsables de la empresa agropecuaria destacó la situación de indefensión que vienen enfrentando, sobre todo en las últimas semanas, aguardando por las respuestas correspondientes por parte de las autoridades de la seguridad en nuestra ciudad.
Desde la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe se vienen reclamando este tipo de delitos y, a pesar de las reuniones desarrolladas con el Gobierno de Santa Fe, aún no llegan las soluciones a la inseguridad que tiene todos los tenores, incluso con casos de dominio nacional como los dos silos bolsa cortados en dependencias de la Cooperativa La Humbertina o los dos camiones de soja que en Zenón Pereyra le robaron a un productor.