Educación

La realidad de las escuela rurales

Foto archivo. Escuela de Pueblo Marini tras la última inundación.

María Alejandra Navarro es Directora de la Escuela Nº 6021 General José de San Martín ubicada en Pueblo Marini, departamento Castellanos. En una nota enviada a RAFAELA NOTICIAS describe la situación que atraviesan las familias y los alumnos de la ruralidad. Como también realiza un pedido para mejorar la educación en este ámbito. 

“Sólo el docente que camina la ruralidad percibe el no cumplimiento de los derechos de niñas, niños y adolescentes contemplados en la ley n° 26061. A estos educandos no se les garantiza en primer lugar el acceso a la escuela, ya que los días de lluvia o barro no cuentan con caminos en condiciones para llegar. Si sumamos voluntades podríamos lograrlo, ya que contamos con caminos arenados o ripiados por dónde bajan los camiones a sacar la producción los días de lluvia o barro, lo cual nos parece perfecto pero nadie le da prioridad a ese niño que vive en el campo con su familia y que está aislado por la intransitabilidad de ese camino. Proponemos dejar un sendero de unos 80cm a 1 metro perfectamente delimitado y protegido para que sea uso exclusivo los días de barro de los niños y docentes que van a la escuela y que sea una vía de entrada y salida en bicicleta o moto para una familia, ya sea para llegar a centros poblados por problemas de salud, para buscar provisiones, etc.
Las escuelas rurales poseen por turno 3:05 hs. de clases, nada en comparación con las escuelas urbanas que tienen 4:15 hs con algunas horas especiales en contra turno y jornada ampliada. Nosotros solamente poseemos el cargo de educación física, mientras que las urbanas poseen además inglés, música, tecnología, plástica, etc. Nos preguntamos ¿dónde esta la igualdad de oportunidades? 
Las inundaciones y la falta de políticas económicas y sociales que beneficien el sector rural hacen que los propietarios cierren sus tambos ya que dejaron de ser una actividad rentable y familias emigren en búsqueda de mejores oportunidades a otras zonas, lo cual provoca la baja de la matrícula de la escuela rural. Están quedando edificios en muy buen estado, con histórica trayectoria, solos, semivacíos. El Estado, nuestros representantes no hacen nada al respecto. Participamos de una capacitación de escuela abierta que trata al alumno como sujeto de derechos y en la práctica sólo es un número. Adolescentes que deberían estar en un secundario, pero que están en sus casas en el campo ¿Dónde está su derecho a la educación (artículo 16) y a medidas de protección (artículo37).
En el marco de la gesta de una nueva ley de educación provincial, solicitamos a través de un petitorio (presentado en la Delegación Regional del Ministerio de Educación, Región III de Rafaela el 13 de junio de 2017 a la sra. Carolina Pellegri), firmado por comunidades educativas de Pueblo Marini, Coronel Fraga, Campo Bertoni, Vila, Bauer y Sigel, Campo Canavesio, Ramona y Colonia Fidela, una reforma en la estructura de la escuela rural e igualdad de oportunidades para los niños de las zonas rurales con respecto a la de las zonas urbanas, ya que todos tienen derecho a completar sus trayectorias en sus territorios. Así como se nos pide trabajar en equipo dentro de las comunidades, sugiero a nivel provincial que todos los ministerios trabajen en red para que los ejes de la política educativa actual se conviertan en una realidad concreta y se trabaje para que lo ‘derechos’ sean respetados, caso contrario, se sancione a los responsables”.

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