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El robo a la escuela del Zaspe: "desesperación" por lo que pasó y un abrazo de solidaridad y hartazgo

El abrazo simbólico de la comunidad educativa a la escuela.

La comunidad educativa de la Escuela Ángela Peralta Pino, del barrio Zaspe, realizó en el mediodía de este martes un abrazo simbólico al edificio de la institución, luego que en la noche del lunes se registrara el robo de los motores de los acondicionadores de aire de las aulas en donde se dictan clases. El hecho fue la gota que colmó el vaso: las autoridades del establecimiento denunciaron que "tampoco tenemos internet porque se robaron todos los cables" y que la sustracción de netbooks y computadoras también es muy frecuente, entre otros hechos delictivos de que son víctimas. La semana pasada, además, los ladrones ingresaron a la cocina y se llevaron termas, pavas eléctricas, ollas y elementos del comedor escolar. Sólo la reposición de los equipos de aire acondicionado demandaría una inversión de dos millones de pesos, estimaron las autoridades.
Valeria Carrizo, vicedirectora de la escuela, apuntó que "estamos con desesperación y un desánimo total. Todo lo que los chicos necesitan los acondicionadores de aire para poder tener clases en un ambiente adecuado en pleno verano, con olas de calor tan intensas como tenemos en Rafaela, y que ahora se los hayan quitado, es algo que sentimos mucho. Queremos dar a conocer esta realidad, porque ahora nos tenemos que hacer cargo de la situación, por eso convocamos a este abrazo simbólico con los padres y los docentes. Más allá de que la escuela recibe ayudas, donaciones y demás, los más afectados por esta situación son los alumnos".

Escuela Peralta Pino: la voz de los docentes tras el robo sufrido, que dejó sin acondicionadores de aire a las aulas.
"Todo destrozado"

La docente explicó que la situación fue informada por la policía a las 12 de la noche del lunes al martes. ""Encontramos todo destrozado y que se habían llevado los motores". Cabe acotar que la escuela está en la manzana de enfrente de la Subcomisaría 1°, y que los motores de los acondicionadores estaban "enjaulados", con una protección de rejas metálicas para evitar robos precisamente.
El hecho se inscribe en una ola de ataques contra la propiedad, que se da en toda la ciudad, incluso con hechos que se cometen a plena luz del día, que son filmados por vecinos con sus teléfonos celulares, y que no sólo afectan a clubes, instituciones sociales e intermedias, sino a viviendas y domicilios particulares e incluso a infraestructura pública: hay sectores de la ciudad -como el espacio verde del barrio Villa del Parque ubicado en la zona de las vías del Belgrano, entre Aristóbulo del Valle y Santa Fe- que están a oscuras porque se han robado los cables del tendido eléctrico.
En el caso de la escuela Peralta Pino, será muy difícil reponer los equipos robados. "Vamos a ver cómo solucionamos esto. Lo que queremos es invitar a reflexionar a los vecinos, a los padres, a toda la comunidad, sobre que esto no se puede repetir. Acá estamos educando a los niños, que se ven violados en sus derechos. Los niños de esta escuela tienen derecho a estar cómodos, a estudiar, a aprender, a estar en un lugar confortable, y no tienen que estar viendo cómo se destruye la escuela. Nos están atacando la escuela", insistió.
De las autoridades educativas, estuvo presente en el acto el titular de la Delegación III Escolar, Gerardo Cardoni, quien indicó que se está gestionando la colocación de ventiladores para atenuar las altas temperaturas de este año. Cardoni admitió que hay hechos delictivos que afectan a las escuelas, aunque por el momento no se ha producido la interrupción de clases en ningún establecimiento de la región.

Reclamo ante la Subcomisaría

Todo el personal de la escuela expresó su angustia. Pero también los vecinos, que en cantidad numerosa concurrieron al frente del establecimiento, expresaron su malestar por la situación que se vive en el barrio. Además de demandar respuestas a las autoridades -las salientes y las electas-, los vecinos marcharon luego hacia la sede de la Subcomisaría 1°.

También frente a la subcomisaría se manifestaron los vecinos.

Allí también reclamaron respuestas al personal policial, dado que no solo la escuela sino también las propiedades privadas son escenario de robos frecuentes de todo tipo.

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