El Concejo Municipal dará tratamiento, en la sesión ordinaria del próximo jueves, a un pedido de informes presentado por los concejales de la oposición, luego que se conociera el saqueo sufrido por las instalaciones eléctricas que forman parte de la infraestructura de urbanización de los 315 Lotes del barrio 42, en etapa de adjudicación definitiva a quienes resultaron sorteados a mediados de mayo.
Como reveló RAFAELA NOTICIAS, el robo se produjo hace unos quince días, cuando desconocidos incursionaron sobre las tres subestaciones transformadoras y además de provocar destrozos y romper las antenas y el grueso cableado de las subestaciones, intentaron -al parecer sin éxito- llevarse las bobinas de cobre de los transformadores. Para ello, habian logrado vaciar el aceite que forma parte de las protecciones de este tipo de transformadores. Debido a los daños, y para evitar nuevos robos, los transformadores fueron retirados completamente y trasladados al Corralón Municipal. Además, hubo daños por otros robos, a tal punto que el alumbrado público está afectado en todo el loteo.
Las preguntas
Según el proyecto que recibió despacho de comisiones en la mañana de este lunes -y que prácticamente con seguridad será aprobado en la sesión del jueves-, los ediles pedirán al Ejecutivo que haga una "cuantificación económica y material de los daños sufridos en las instalaciones eléctricas de la urbanización "315 lotes" y si será el Instituto Municipal de la Vivienda quien deberá asumir los costos económicos". RAFAELA NOTICIAS ya anticipó que será efectivamente el IMV quien tendrá que hacerse cargo de la reposición, dado que en las garantías de la obra no están contemplados los factores de inseguridad.
Además, la oposición quiere saber "si la obra contaba con personal de seguridad al momento de los hechos y si está previsto sumarla a raíz de lo acontecido considerando que transcurrirá un largo tiempo hasta que el sector se encuentre habitado". Finalmente, pregunta también "en qué etapa administrativa se encuentra la adjudicación de los terrenos".
Luego de descubierto el robo, el IMV contrató a un servicio de vigilancia privada, que anteriormente no estaba activo en la zona, lo que de alguna manera facilitó el accionar de los delincuentes.