La situación judicial del complejo de departamentos ubicado en Avenida Mitre al 500 tuvo un nuevo capítulo la mañana de este jueves, luego de una audiencia desarrollada en los Tribunales de Rafaela, en la que se pidió el cese de estado antijurídico.
Para la Fiscalía y los querellantes de la causa, esos inmuebles fueron usurpados y deben ser desalojados; algo que es rechazado por la defensa de los que viven allí al argumentar que varios de ellos firmaron contratos de alquiler con quien poseía el boleto de compra-venta del terreno y que tenían su autorización para ingresar. En el mismo sentido, sumaron que deben respetarse los derechos de los menores y mujeres en situación de vulnerabilidad que habitan el lugar.
La parte acusadora, sostiene que el complejo no está habilitado (basándose en un informe que presentó personal municipal que participó de esta audiencia) y que las personas que actualmente lo ocupan ingresaron de manera clandestina, ejerciendo violencia tanto para entrar como para permanecer.
Hace aproximadamente 12 años, dos privados acordaron la construcción de un edificio de departamentos, a través de un fideicomiso, pero el negocio quedó trunco por diversas circunstancias. Esa situación hizo que se iniciara una serie de acusaciones y presentaciones cruzadas, que desembocó en un acuerdo entre las partes para desalojar el lugar. Algo que nunca ocurrió y que siguió complejizándose ya que el lugar comenzó a convertirse en un “aguantadero” para personas de mal vivir (incluso se realizaron varios allanamientos por hechos de inseguridad que terminaron con detenidos y secuestro de elementos robados).
En la audiencia de hoy, y por más de dos horas, los requirentes defendieron su postura con la intención de que sea la justicia penal quien le ponga un punto final al conflicto. Sin embargo, esto no fue así. El Juez Nicolás Stegmayer, rechazó el pedido de decretar el cese de estado antijurídico.
Si bien el juez no se expidió sobre cómo y donde tienen que litigar las partes, la decisión adoptada implicaría que la causa debe seguir su curso por la vía civil, siendo ese el fuero adecuado para tramitar un probable desalojo. No obstante, la causa promete tener más capítulos.