Cerca de las 21 horas de este lunes robaron en un kiosco ubicado en Fader y San Lorenzo en barrio Pizzurno, uno de los sectores que viene siendo castigado por la inseguridad en el último tiempo. El local cuenta con cámaras de seguridad y puerta con cerrado electrónico, aún así es el tercer robo que sufre desde su inauguración el año pasado. En este último hecho, un sujeto ingresó a comprar caramelos y cuando abrió la puerta para salir, dejó entrar a su cómplice, que a punta de pistola pidió la plata de la caja. Al momento de retirarse con el dinero, parte del mismo se le cayó al piso pidiéndole al empleado que lo levante. Mientras esto ocurría ingresó al local un cliente a quien el delincuente también amenazó con el arma. Finalmente los sujetos huyeron del lugar en una moto que dejaron a la vuelta del comercio. Aunque antes de irse en el vehículo quisieron entrar a una casa lindera al local que estaba con las luces prendidas y la ventana abierta, algo que no pudieron concretar dado que el dueño de la vivienda se dio cuenta y salió a correrlos. Según la descripción del empleado del kiosco, se trataría de menores de edad. Por otro parte, la suma sustraída rondaría los 600 pesos. 
Otro robo a un kiosco
A las 20 horas, tres sujetos, aparentemente menores de edad, ingresaron a un maxiquiosco de la zona oeste de la ciudad y se llevaron un celular, una notebook y dinero en efectivo. Esto luego de amenazar con un arma al propietario del local. Huyeron en bicicleta.