El departamento Castellanos es uno de los principales distritos provinciales donde se realiza la actividad apícola. Por eso, para conocer sobre el tema, RAFAELA NOTICIAS consultó a Emanuel Orellano de la Estación Experimental del INTA Rafaela, quien es Técnico en Administración Rural, promotor asesor del Programa Cambio Rural y Profesor de la Tecnicatura en Gestión y Producción Apícola de la UNL. También fue consultada Julieta Merke, Doctora e investigadora del INTA y profesora en la UNL. Ambos aportaron sus conocimientos, para brindar detalles en este artículo sobre el desarrollo de la apicultura en la región.

Miel: un producto de exportación

Según datos aportados por los especialistas mencionados, Argentina es el segundo exportador mundial de miel, detrás de China. Históricamente los principales mercados son Unión Europea y Estados Unidos pero el último año como consecuencia de la crisis económica europea y la guerra en Ucrania ocasionaron una reducción de los volúmenes y precios desde el viejo continente. Es por este motivo que el principal destino de las exportaciones apícolas es EEUU.
Esta situación trajo aparejado para el mercado local reducción del precio de comercialización a granel y menos contratos de exportación cerrados. Otra de las consecuencias fue la reducción de los precios para la miel que superan los 50 mm de color y en algunos casos todavía esta guardada en sus depósitos esperando una dinamización de mercado.
Según datos de la secretaría de Agricultura Ganadería y pesca de la Nación actualmente en nuestro país hay alrededor de 4.000.000 colmenas en producción y más de 19.000 productores a lo largo y ancho de nuestro territorio.
En la actualidad, en números, se exporta cerca del 95% (70.000 toneladas) de la miel que producimos, quedando de manifiesto el bajo consumo local.

¿Cuál es la coyuntura económica de la actividad en el contexto actual del país?

En el actual contexto económico se observa que los precios de la miel no acompañan el nivel de alza de precio de los insumos. Es muy conocido en el sector el caso del incremento en los costos de alimentación y movilidad que superan ampliamente la variación de precios de la miel.
Como ejemplo podemos citar estudios de casos realizados recientemente en el INTA Rafaela donde el punto de equilibrio, el cual representa los kg de rendimiento necesario para cubrir el gasto durante el año para producir pero sin llegar a ganar dinero, hoy se encuentra en un valor equiparable en los 23 kg de miel por colmena por año. Si se compara con resultados del año pasado ese valor se encontraba en 17 kg de miel por colmena. Esta información marca un incremento en los costos de producción asociados principalmente por un aumento de precio de los insumos y un estancamiento de los precios de comercialización.
El rendimiento que alcanzaron los productores de miel depende de la región, de las condiciones climáticas, ambientales y fundamentalmente de la aplicación de un manejo adecuado de las colmenas. En Rafaela se han registrado este año rendimientos promedio que van desde 19 kg a 35 kg de miel por colmena, esto deja en evidencia el margen de mejora que existe en la región.
Algunos productores agregan valor a su producto, a través de la venta fraccionada, identificando sus mieles de acuerdo a las características particulares de cada miel, o certificando orgánicamente, mediante lo cual consiguen precios diferenciales.

¿Cuáles son los principales centros apícolas?

La actividad apícola se desarrolla en varios puntos del país, pero Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y La Pampa son las principales provincias productoras.
Según datos del RENAPA que es el Registro Nacional de Producción Apícola la provincia de Santa Fe posee 410.653 colmenas, distribuidas en 5.469 apiarios, esto representa 11% de las colmenas totales del país.
Además, la provincia posee 105 salas de extracción de miel habilitadas, 3 establecimientos exportadores, 3 establecimientos fraccionadores de miel habilitados para la exportación y 56 habilitados por el RNE (Registro Nacional de Establecimiento). Ubicando así a Santa Fe en el segundo lugar a nivel país en la cantidad de establecimientos fraccionadores. También posee 7 establecimientos estampadores de cera, 4 cabañas apícolas certificadas y 20 multiplicadores de reinas. Además, se suma la oferta académica disponible cómo es el caso de la Tecnicatura Apícola que se dicta en la Universidad Nacional del litoral, Curso de especialización para apicultores de la Universidad Nacional de centro y los cursos de iniciación ofrecidos por el INTA.

¿Cómo se posiciona el departamento Castellanos?

Si se realiza un análisis por departamento se observa que la mayor concentración de colmenas se encuentra en los departamentos: San Cristóbal con 95.333, Castellanos 49.247 y Las Colonias con 47.619 colmenas. Estos números son representativos de la importancia de la actividad apícola en el entramado productivo y social ya que estas colmenas pertenecen a familias de productores y aportan la economía de los pueblos rurales de la región.

Apicultura: salida laboral o actividad complementaria

Actualmente existe un proceso de incorporación de apicultores, personas que aspiran encontrar en la apicultura una salida laboral o como una actividad complementaria para su economía familiar. Es una actividad que presenta algunas ventajas para iniciarse, entre ellas podemos nombrar: se requiere de un capital inicial bajo para comenzar, el trabajo se puede adaptar a la disponibilidad de tiempo el emprendedor o emprendedora, se puede complementar con ganadería y agricultura sin competir por espacio y recursos naturales.
Esta actividad tiene como característica principal que es una producción estacional, la etapa de cosecha y multiplicación de colmenas se realizan en primavera y verano lo cual exige que se realice un manejo adecuado de los apiarios para alcanzar altos rendimientos y reducir las pérdidas invernales.
Esta estacionalidad y dependencia del ambiente repercute en las abejas ya que son sensibles a procesos de contaminación y degradación del ambiente. Es importante destacar la necesidad de incorporación de prácticas agropecuarias que estimulen la salud ambiental y la biodiversidad.

Necesidad de capacitación y de Buenas Prácticas de Manejo

Esto requiere que aquellas personas con ánimo de emprender tomen como prioridad dedicar tiempo a capacitarse. Las abejas son organismos biológicos requieren llevar adelante Buenas Prácticas de Manejo para evitar pérdidas por enfermedades cómo varroa o Nosemosis , déficit nutricionales y aprender a interpretar el ambiente. En apicultura se produce miel y es un alimento valorado por sus muchos beneficios, pero para esto es necesario trabajar con protocolos y buenas prácticas de manejo en cosecha.
El INTA junto al Conicet realizan un aporte muy importante con investigadores y asesores dedicados a construir un sendero que durante muchos años ha colaborado en posicionar la apicultura argentina como referencia a nivel mundial.
En la EEA INTA de Rafaela se encuentra un grupo de investigadores y técnicos dedicados a abordar temas asociados a: Salud de las abejas, calidad de miel, selección por comportamiento y asesoramiento.
Además, trabajan vinculados a el programa Cambio Rural el cual facilita a los apicultores la herramienta de un asesor con el objetivo de ser más eficiente, productivos y alcanzar la escala necesaria para sostener las empresas en el tiempo.
A lo largo del año el INTA y el Conicet realizan cursos de iniciación para futuros apicultores. Este año se realizó en la Ciudad de Ceres y próximamente se realizarán en las localidades de Casilda y San Guillermo.