En el Punto Violeta ubicado en Bv. Lehmann 2700, al lado de la GUR y frente al nuevo hospital, diariamente un equipo interdisciplinario realiza atención y acompañamiento a las mujeres que son víctimas de violencia de género. La instalación de estos lugares nació en la gestión anterior, pero la decisión de las nuevas gestiones, tanto provincial como municipal, es robustecer y ampliar el trabajo de estos dispositivos. De hecho, este jueves Rafaela será sede de la firma de convenios entre municipios de la región y el gobierno provincial para fortalecer, mediante el apoyo económico, el trabajo en cuestiones de género.
La Dra. Carla Cavalié, coordinadora de la Oficina de Violencia de Género de la Municipalidad de Rafaela, confirmó a RAFAELA NOTICIAS que no solamente se está trabajando en el Punto Violeta, sino que la intención es que este espacio amplíe su nivel de acción para tener "mayor cercanía al territorio" con otras actividades que no sean solamente la de atención específica a casos de violencia de género. Se espera que en el lugar se puedan desarrollar eventos de promoción y prevención, donde, por ejemplo, grupos de mujeres se acerquen para trabajar en talleres abiertos a la comunidad para concientizar sobre temas de género. Cavalié también detalló algunas actividades que ya han realizado desde la Oficina de Violencia Género Municipal durante el mes de marzo, mes de las mujeres y de las disidencias, donde se estuvo trabajando en las postas sanitarias, en el Centro de Integración Comunitaria, en la Plaza 25 de Mayo; con la consigna de visibilizar las tareas domésticas y de cuidado que siguen recayendo sobre las mujeres y las consecuencias que esto trae para ellas. Algo que quedó reflejado en una encuesta del ICEDEL a través de la cual surgieron datos importantes como la ansiedad, preocupación y miedo que producen en las mujeres las tareas mencionadas, que se suman a las labores que además tienen que hacer fuera de la casa. En tanto, en junio también la Oficina de Violencia de Género Municipal trabajó en la visibilización del "Ni una menos" a través de un relevamiento de los femicidios a nivel nacional, que terminaron arrojando un número similar al de consultas por violencia de género que se recibieron en Rafaela, donde atendieron en la dependencia estatal unas 180 mujeres. "Se trata de mujeres que están en riesgo de un femicidio y el objetivo del equipo es trabajar para evitar que eso suceda", explicó Cavalié.
La Dra. Lorena Adoratti, a cargo de una coordinación técnica dentro la Secretaría de Desarrollo Humano, por su parte ratificó que "el Punto Violeta sigue activo independientemente del cambio de gestión, porque la cuestión de género atraviesa a cualquier bandera política, y nadie puede estar en desacuerdo que estos programas necesitan tener continuidad más allá del contexto nacional", señaló. Y agregó que "las cuestiones de las mujeres siguen siendo un tema de agenda que atraviesa cualquier cambio de gestión". Se mostró optimista a pesar de que todavía están al aguardo de algunas definiciones a nivel nacional en lo que respecta a recursos para políticas de género: "Creemos que se va a poder sostener un trabajo articulado y a conciencia de todas las necesidades que hay que cubrir en una situación de violencia de género, independientemente de los recursos que tenga el Estado y de las decisiones del Estado nacional", expresó.
La Dra. Yamila Hilal, que integra el equipo interdisciplinario que trabaja en el Punto Violeta, comentó que los casos que atienden llegan tanto de manera espontánea por parte de las propias víctimas, por derivación de instituciones o bien por familiares de las mujeres que se comunican para saber cómo abordar el tema. "Hay un trabajo mancomunado con las instituciones que hacen que el transitar de las personas en situación de violencia no sea tan hostil, porque es súper revictimizante y muchas veces se encuentran con la no respuesta o negativas ante las solicitudes que realizan", expresó Hilal.
La abogada comentó que el Punto Violeta está abierto para consultas de lunes a viernes de 7 a 13 horas, pero además funciona una guardia social todos los días, las 24 horas, donde la gente puede solicitar ayuda, comunicándose al 15302763 (tiene línea de WhatsApp) o bien al 105 de la Guardia Urbana. En el mismo sentido que sus compañeras, Hilal señaló que "más allá de las posturas políticas que se puedan tener, existe un marco normativo internacional, nacional, provincial y municipal que obliga a los Estados a hacerse responsables de esta problemática que es social, que nos compete a todos y todas, y que no se puede desconocer".
La Licenciada en Trabajo Social, Maite Durán, también forma parte del equipo interdisciplinario que trabaja en el Punto Violeta. Comentó que el trabajo que allí se hace tiene que ver con "la primera escucha" a la víctima, con "ordenar la situación", asesorar y acompañar, en caso de ser necesario, a efectivizar una denuncia policial, solicitar alguna medida de protección peraonal y denunciar si esta no se cumple, como generalmente suele suceder en muchos casos. Además, Durán comentó que en el equipo se encargan de realizar informes interdisciplinarios a solicitud de diversas instituciones o de la Justicia "para dar cuenta de la gravedad de un caso o de la complejidad de una situación". Y destacó que no solamente ingresan casos al Punto Violeta, sino que además se realiza un acompañamiento de cada uno de esos casos, coordinando intervenciones con otras áreas como pueden ser Seguridad, Fiscalía u otras dependencias municipales. "La atención es pensando en una problemática que debe ser abordada de manera integral", señaló.
Casa de Amparo para Rafaela
La consulta de RAFAELA NOTICIAS a las entrevistadas fue qué sucede mientras se resuelve una situación de violencia de género con las mujeres que no tienen un lugar para vivir, dado que no es nuevo el pedido de ONGs respecto a que exista en la ciudad una Casa de Amparo para víctimas de estas situaciones. En ese sentido, Cavalié manifestó que por un lado "las mujeres tienen el derecho a pedir la exclusión de hogar del agresor", algo a lo que apuntan que se cumpla, más allá de que a veces no sale con la premura que requiere el caso, por parte de la Justicia. Cuando no se da esa exclusión, "se trabaja con la familia ampliada" de la víctima para que pueda hospedarla o bien existen "redes de apoyo vinculadas al alojamiento temporario" de las mujeres que lo necesiten. Y llegado el caso, si es necesario, se puede trasladar a la víctima a alguna de las casas de redes de protección que tiene la Provincia en otras localidades.