El Instituto Provincial de Estadísticas y Censos dio a conocer este jueves el costo de la construcción en Santa Fe que se ubica en 150.398 pesos el metro cuadrado, marcando una variación anual del 102,3 por ciento. Ante este dato, RAFAELA NOTICIAS consultó al Presidente del Colegio de Arquitectos de Rafaela, Claudio Walter, que confirmó que la cifra brindada por la Provincia se encuentra totalmente desactualizada. "Es un precio irreal; el Ipec tiene un problema que es que viene con un desfasaje histórico en la valoración del precio por metro cuadrado",comentó el profesional. Agregando que si bien los porcentajes de incremento que informa el organismo oficial se asemejan a los reales, como parte de una base desactualizada, el monto final por metro cuadrado termina dando la mitad de lo que realmente vale, que se ubica actualmente en los 300 mil pesos. "No existe un valor único por metro cuadrado de construcción, sino que cuesta dependiendo de la calidad de los materiales a utilizar, la calidad de la mano de obra y la formalidad de esa mano de obra. ", detalló Walter.
Para un estándar de calidad medio, pero con una base buena - sin lujos-, tenemos que estar hablando de 280.000 a 300.000 pesos por metro cuadrado. De ahí para arriba el límite lo pone la capacidad de pago de quien construya, ya que hay infinidad de opciones en materiales con valores que se van incrementando significativamente. De ese monto para abajo, se empieza a resignar calidad
En otro tramo de la nota, el Pte. del Colegio de Arquitectos de Rafaela comentó que según el índice de la Cámara Argentina de la Construcción, que "refleja de manera fiel la variación inflacionaria del sector, el porcentaje de aumento ronda el 112 por ciento de marzo del 2022 a marzo del 2023", lo que "demuestra que la construcción sigue el ritmo inflacionario". ¿De qué depende dicho aumento? Por un lado de lo que fue pasando con los materiales, que tuvieron diferencias de incrementos porcentuales disímiles. "Algunos han aumentado un 140 por ciento anual y otros un 60 por ciento. Los básicos como cemento, arena, piedra, hierro, están en el orden del 110, 120 por ciento de aumento anual, mientras que hay otros que se han ido hasta el 160", explicó Walter. Agregando que en la actualidad se nota una suba de precios cada 15 o 20 días, por lo que el consejo para los que van a construir es que acopien materiales, todo lo que puedan y lo antes posible. Por otro lado, el incremento de los costos para construir está dado por la mano de obra, que varía su precio de acuerdo a la oferta y a la demanda. "Los constructores que tienen trabajo de sobra suben sus pretensiones en cuanto al costo, mientras que aquellos trabajadores que no tienen una ocupación plena bajan los números", señaló el profesional.
Rafaela comparada con otras localidades
Según el Pte. del Colegio de Arquitectos, Rafaela no está entre las localidades más caras para construir. Sino que ciudades más grandes como Buenos Aires, Santa Fe y Rosario tienen precios mayores dado que allí "la construcción está mucho más formalizada y regulada en todo lo que tiene que ver con la legislación laboral, inscripciones y otros aspectos; lo que impacta directamente en el costo de la construcción". "A su vez, yendo más adentro de la provincia se van dando algunas situaciones inversas (es decir, la mano de obra es más barata), no así en los pueblos o pueblos pujantes de la zona, donde la oferta se restringe mucho y los albañiles se cotizan muy caro", señaló el entrevistado.
Actividad plena en Rafaela
"A pesar de la situación económica actual, se sigue construyendo en Rafaela, si bien está claro que esa bonanza no es para todos sino para algunos. Pero dentro de lo que es la actividad de la construcción se está trabajando en prácticamente todos los sectores, desde lo que es ampliación, construcción nueva de viviendas particulares e individuales, proyectos de inversión en edificios, y también las empresas están aprovechando la oportunidad de su flujo en pesos para adaptar sus instalaciones o crecer ediliciamente. Venimos con años de buena dinámica: el 2022 fue un año donde a pesar de lo inflacionario la actividad de las construcción estuvo a pleno y hasta ahora en el 2023 no se detuvo".
Escasa mano de obra
La actividad plena en la construcción hace que prácticamente no se consiga mano de obra disponible, ya sea formal o informal. "No hay gente que esté ofreciendo o buscando trabajo, está todo el mundo con ocupación plena, así que para el que quiere construir se le dificulta conseguir una buena calidad de mano de obra y a un precio posible de pagar", señaló Walter.